Los celulares en la educación

César Eduardo Briceño Toledo

El 17 de abril de 2014, mediante Acuerdo Ministerial 70-14, se expidió las regulaciones para el uso de teléfonos celulares en las instituciones educativas, con el objetivo de fomentar el consumo crítico de las nuevas tecnologías de comunicación e información dentro de las aulas escolares.

Bajo la responsabilidad del docente se dejó el uso de dispositivos electrónicos en el aula, con la capacitación que fue insuficiente y si garantía alguna. Según la retórica del Reglamento General de la Ley Orgánica de Educación Intercultural(LOEI) serían sancionados: la deshonestidad académica en actividades de evaluación del estudiante y en los comportamientos que atenten contra la dignidad de las personas como acoso cibernético, consumo de pornografía, extorsión sexual, etc., se sancionarían de forma independiente.

Desde 2013, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, impulsa el uso de teléfonos inteligentes en la educación; no obstante, es discrecional como en Costa Rica, mediante un reglamento interno permitir o no el uso del celular. En Bolivia, en cambio prohibió el uso de celulares en clases en el 2014 debido a que interrumpen las actividades académicas. Los parlamentarios franceses aprobaron la prohibición de los teléfonos móviles en las escuelas públicas del país; porque sus hijos se pasan horas mirando las pantallas de sus teléfonos y por el aumento de los casos de acoso a través de internet.

Otra reforma más de los neo-revolucionarios al sistema educativo, que concitó la atención ciudadana pero que careció del sustento técnico y científico. (O)