La autoridad universitaria afirma que no ha recibido ninguna comunicación oficial, sobre su cargo.
La vicerrectora académica de la Universidad Nacional de Loja (UNL), Martha Reyes Coronel, es clara y enfatiza que viene cumpliendo con absoluta normalidad sus funciones inherentes a su cargo.
De acuerdo con la vicerrectora, es a través de las redes sociales y medios de comunicación que trascendió una supuesta orden del Consejo de Educación Superior (CES) para la subrogación o reemplazo de su cargo, pero recalca que ella no ha recibido ninguna comunicación oficial.
Martha Reyes, con documento en mano, asevera que cuenta con una certificación, del 6 de noviembre de 2017, emitida por la Dirección de la Talento Humano de la UNL, donde en la parte pertinente se lee “la comisión de servicios no se ejecutó conforme al visto bueno condicionado de la Comisión Interventora (…) en razón que la Dra. Martha Reyes Coronel no hizo uso de dicha comisión”.
Esa comunicación, asegura Martha Reyes, fue remitida a Carlos Rojas, presidente de la Comisión Interventora, para aclarar la situación de la vicerrectora en cuanto a la comisión de servicios. “Este documento fue emitido oportunamente”, subrayó.
Estrategias
La vicerrectora considera que esta es otra de las estrategias, “que tanto la Comisión Interventora, como el CES, ha implementado para desconocer a las autoridades legítimas de la Universidad Nacional de Loja”.
Martha Reyes sostiene que el objetivo de la intervención de la UNL en ningún momento ha sido académico, ni para fortalecer la parte administrativa o la investigación, “ha sido para tomar el gobierno universitario de la institución”.
La vicerrectora es bastante crítica con la intervención y señala que la UNL es víctima de una serie de irregularidades que están afectando a la universidad y la paz social de todas las provincias que son parte del área de influencia de la institución. Para Martha Reyes es lamentable que los organismos de control no revisen y resuelvan lo acontecido.
La autoridad universitaria también considera que es necesario identificar a quienes realmente promueven las acciones de un grupo de estudiantes e indica que existe “un grupo de personas que aducen haber ganado un concurso de merecimientos, junto a ellos un grupo de personas que perdieron las elecciones en la UNL (…) y un grupo de administrativos que siempre fueron los dirigentes de los gremios de la UNL y de los movimientos políticos, que hasta antes de 2008 dominaban la universidad”.
De acuerdo con la vicerrectora, estos grupos se han cohesionado y son los que promueven este tipo de acciones, que demuestran “un nivel bastante grande de desesperación por tratar de mantenerse en los cargos”. (OGS)
EL DATO
La intervención de la UNL se extendió hasta julio de 2018.