Los mercados están quedándose vacíos, los comerciantes salen a las calles. Municipio controla la informalidad.
Desde ayer, el Municipio de Loja, a través de Seguridad Ciudadana y Control Público, procedió a ubicar vallas en las aceras de la calle 18 de Noviembre frente al Centro Comercial de Loja. El objetivo es que los comerciantes informales no se ubiquen en este espacio con puestos de ventas de diferentes artículos.
La medida rige tras el crecimiento acelerado del número de comerciantes dedicados a vender en la calle en esta pandemia, lo que perjudica la circulación del peatón, provocando una mala imagen a la ciudad. En este espacio se ubicaban de manera regular vendedores de artículos de juegos para niños, comida rápida, dulces, vestimenta, entre otros.
Fabián López, director de Seguridad Ciudadana del Municipio, manifestó que uno de los problemas que se veía en este lugar, es que las aceras al estar ocupadas por vendedores ambulantes, los peatones deben usar las ciclovías para transitar, ya que por la vereda es imposible. “Aquí los informales ubicaron puestos fijos de lunes a domingo sin ninguna consideración de los peatones”, reveló.
“El derecho al trabajo nadie les ha quitado, si quieren vender lo pueden hacer, pero caminando y no ubicando puestos fijos. El vallado alcanza una cuadra e irá hasta que se vea que el problema ha terminado al menos en este sector, porque aún queda el tramo de la calle 10 de Agosto, entre otros”, dijo. Se prevé que aquí existan más de 20 comerciantes informales.
El personal policial y municipal estará custodiando la zona, la idea es que la gente camine libremente sin alboroto de ventas. Hay otros espacios donde también han sido intervenidos como la calle Santo Domingo en el sector del mercado Gran Colombia en El Mayorista.
Para María Maldonado, presidenta del Centro Comercial, la medida es buena, pero el problema es que los comerciantes no cumplen, tal vez respeten un día, al siguiente regresan con mayor fuerza y se sitúan en otros lugares, porque no hay respeto hacia las autoridades. “Ya ha habido casos donde han tratado de cerrar estos espacios, pero cuando están los policías hay respeto, cuando se van todos regresan sin ninguna consideración”, alegó.
Solicitó al alcalde actuar con medidas drásticas y tomar decisiones firmes, porque la mayoría de adjudicatarios, al no tener ventas al interno, están dejando los puestos y saliendo al comercio informal, donde no pagan un solo centavo de arriendo u otros servicios básicos que cobra la municipalidad.
EL DATO
La venta informal es un tema sensible de Loja, cada vez crece más en esta pandemia.
TOME NOTA
En las calles de Loja se estima que existen más de 1.200 vendedores informales que a diario se ubican en estos lugares.