Yadira Guamán, primera lojana en Juegos Olímpicos

La marchista está fuera de las competencias, pero su nombre prevalece en la historia nacional.

Disciplina, constancia y pasión por el deporte, son algunas cualidades que definen a Yadira Alexandra Guamán Maza, marchista de 35 años.
La atleta de alto nivel nació en la oriental provincia de Zamora Chinchipe. Es hija de Juan Guamán y Beatriz Maza, quienes procrearon cinco hijos (dos mujeres y tres varones). Como hermana mayor, Yadira fue y continúa siendo un ejemplo de superación para sus seres queridos, amigos y personas en general.
El amor por el deporte lo lleva en las venas y forma parte de una rutina familiar. Es hermana de la también marchista Maritza Jeaneth Guamán, quien ha portado la camiseta tricolor en campeonatos Sudamericanos, Panamericanos y Juegos Olímpicos.
Gran parte de su vida ha vivido en Loja, ciudad en la que tuvo la oportunidad de pertenecer a la Federación Deportiva, estamento donde inició su formación como figura profesional. Fue el entrenador Luis González quien le ayudó a desarrollar su potencial, con lo que pudo escribir una historia llena de gloria y grandes sacrificios que le merecieron importantes reconocimientos nacionales e internacionales.
Hace seis años, decidió retirarse de las pistas con la satisfacción de haber cumplido con su propósito. Hasta la fecha, es considerada como una de las máximas referentes del atletismo lojano y ejemplo para las nuevas generaciones.
¿Cómo descubrió su pasión por la marcha?
Soy una persona aficionada por el deporte desde que tengo uso de razón. Esta actividad me permite ejercitar el cuerpo y mantener un buen estado físico.
Siempre me ha gustado correr. A mis 10 años tuve la primera competencia, esto mientras estudiaba la primaria en el centro educativo Fe y Alegría, hoy llamado Eduviges Portalet.
El atletismo estuvo presente en mi vida hasta los 28 años. Esta disciplina requiere esfuerzo y dedicación, a los que considero como los ingredientes fundamentales para sobresalir y obtener buenos resultados.

¿Contó con el respaldo suficiente?
Mi familia siempre me ha apoyado y se ha convertido en el eje principal de mi carrera. Constantemente, mis hermanos y yo sentimos el respaldo de nuestros padres, quienes nos impulsan a luchar por lo que queremos. Nunca se han opuesto a nuestras pasiones y confían en las capacidades que tenemos.
Hoy en día les guardo un infinito agradecimiento, ya que sus palabras alentadoras me motivaron a seguir entrenando y dejándolo todo en la pista.

¿Cuáles han sido sus pasos en el atletismo?
Mis primeros pasos en este deporte inician en la escuela, posteriormente, tengo la oportunidad de asistir a eventos provinciales, nacionales e internacionales. A mis 17 años empecé a viajar al extranjero, y desde aquel entonces he debutado en diferentes competencias de renombre. Soy cuatro veces campeona Sudamericana. Tercera a nivel Panamericano. He asistido a seis campeonatos del mundo y participé en los 20 kilómetros de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Logré el pase a este importante evento tras conseguir una marca de 1 hora, 33 minutos y 18 segundos en el Sudamericano que se disputó en junio del 2011 en la ciudad de Buenos Aires (Argentina), donde llegué en cuarta posición. Es así como me convertí en una de las primeras ecuatorianas en conseguir un boleto a la capital de Inglaterra en junio del 2011, asimismo, fui la primera lojana en debutar en unos Juegos Olímpicos.

¿Por qué decidió retirarse?
Me desvinculé del atletismo profesional hace más de seis años. Lo hice porque tenía algunas lesiones, además, deseaba ejercer mi carrera universitaria como docente de Educación Física. En la actualidad, imparto clases en la Unidad Educativa del Milenio Bernardo Valdivieso y me siento contenta porque puedo dedicarme a lo que me gusta, pero desde otra faceta.

¿Cuáles son sus aspiraciones?
Por el momento, deseo continuar ejerciendo la docencia. También quiero estudiar un masterado en esta área.
Mi principal objetivo es seguir ayudando a niños jóvenes y adultos, para que se anime a realizar actividad física y no se den por vencidos ante las circunstancias y obstáculos de la vida. Cualquier deporte es bueno para la salud, sin embargo, cuando se practica de forma profesional, además del bienestar físico y mental, se obtienen reconocimientos que llenan de orgullo a la familia, amigos y a todo un país.

TOME NOTA
Las competencias internacionales también le permitieron compartir con nuevas culturas y conocer personas.
EL DATO
Yadira ejerce la docencia en Educación Física por seis años.
EXTRACTO
“Mis padres siempre han estado presentes y apoyándonos en todo lo que nos gusta”