María Nicol Morales Veintimilla es una joven artista de la localidad de 19 años. La talentosa lojana, de nacionalidad española, terminó sus estudios secundarios hace un año, y desde aquel entonces aprovechó el tiempo para dedicarse con mayor entrega a la pintura, una actividad que le apasiona y que planea ejercer durante toda la vida.
Nicol, como le llaman sus familiares y amigos, comenta que desea estudiar la carrera de Administración de Empresas, pese a no tener relación alguna con el arte, no obstante, considera que es un ámbito donde le gustaría desempeñarse profesionalmente.
Sus primeros dibujos los realizó a los ocho años, siendo sus profesores y compañeros de aula, los principales espectadores de su trabajo: “en aquel tiempo me di cuenta de que a la gente le gustaba lo que hacía”, menciona. Es así como identificó en el arte una forma inmediata y agradable de exteriorizar sus emociones.
La exponente señala que aprendió a pintar por su propia cuenta, y que a lo largo de los años pudo perfeccionar la técnica gracias a la autoformación y sugerencias de amistades cercanas. Comenta que alguna vez pensó tomar clases de pintura, sin embargo, no se animó, ya que tenía temor de que su estilo sea modificado.
Manifiesta que para expresar su talento utiliza principalmente lienzo y otros materiales que se adapten a la propuesta que quiere representar. También realizaba diseños en piedra, sin embargo, los dejó de hacer, ya que tenía complicaciones para encontrar piedras que cumplan con ciertos parámetros estéticos y de calidad.
Los paisajes y animales son las temáticas que más le fascina pintar: “me gusta hacer cuadros con bastante color y llamativos”, recalca. Le agrada laborar en un espacio cómodo y con buena iluminación, además, suele escuchar música de sus artistas favoritos mientras sus manos reflejan en un lienzo lo que dicta su mente y corazón.
Nicol tuvo la oportunidad de plasmar su habilidad y creatividad en el Festival Internacional de Artes Vivas de Loja, asimismo, sus cuadros se han expuesto en algunos eventos de Zamora Chinchipe.
Menciona que su mayor motivación son sus padres, quienes confían en su potencial y le brindan palabras de aliento: “cuando pinto mis papás se ponen muy contentos y por eso me gusta hacerlo”, añade.
Como parte sus aspiraciones, desea que sus obras se expongan en galerías, museos y en diferentes escenarios del mundo, con el fin de que la gente reconozca su trabajo. También aspira convertirse en motivación para aquellas personas que tienen temor de incursionar en el arte, ya que muchas veces las opiniones influyen positiva o negativamente en el crecimiento profesional e intelectual de los seres humanos.
El trabajo de Nicol Morales está disponible en sus dos cuentas de Instagram @alexmer_2001 y @nicol_morales2001, donde las personas pueden hacer sus pedidos o adquirir alguna de las piezas.
TOME NOTA
Nicol hace envíos de sus pinturas a todo el país.
EL DATO
La artista nació en España y llegó a Loja a los 14 años.