José Yupangui: “exigimos el arreglo de la vía de Santa Inés Bajo”

PRESIDENTE. José Yupangui lidera a la comunidad.

La falta de lastre impide la circulación vehicular durante el invierno. La carretera requiere ampliación en algunos tramos.

 

El sector Santa Inés Bajo está ubicado a cinco minutos del barrio Lote Bonito. En la localidad viven al menos 60 familias que se dedican mayoritariamente al cultivo de granadilla, tomate de árbol, maíz, entre otros productos.

Los moradores presentan algunas necesidades que no han sido resueltas, no obstante, la directiva continúa en su lucha por conseguir mayores beneficios en obra pública.

Lastrado de la vía

El estado de la carretera es deficiente debido a la falta de lastre. En temporada invernal la comunidad queda totalmente aislada, puesto que los vehículos no pueden circular por la zona.

José Yupangui, presidente del sitio, manifestó que han dialogado con las autoridades sobre el tema, sin embargo, están a la espera de una respuesta y no pierden la ilusión de beneficiarse con tan anhelado servicio.

Comentó que, en invierno los habitantes deben caminar aproximadamente un kilómetro desde Santa Inés hasta el barrio Lote Bonito, con la esperanza de encontrar algún vehículo que los traslade a otros puntos de la urbe, asimismo, señaló que algunas personas del lugar laboran en el mercado, por lo tanto, cuando la vía queda inhabilitada por las lluvias, no tienen más opción que cargar los productos.

Como resultado de los trabajos de alcantarillado, la situación vial se agravó. Hasta la fecha se pueden ver las excavaciones realizadas para ubicar las alcantarillas, ya que las cubiertas aún no han sido colocadas: “queremos que se concluya con la obra para que la vía preste un mejor servicio”, indicó Maritza Valverde.

Esta moradora afirmó que en invierno no puede salir de su casa, porque en la carretera se forman grandes capas de lodo.

Agua potable

Con la división de los terrenos para crear las lotizaciones, algunos residentes no pudieron beneficiarse con el agua potable.

Maritza mencionó que el recurso no abastece eficientemente a las familias. En su caso particular, dijo que cuando alguno de los vecinos abre la llave, su vivienda se queda sin el líquido vital: “no tenemos matriz, por eso el agua se transporta a través de una fina manguera”, expuso.

Por su parte, José Yupangui se define como una de las personas que descubrió la fuente de agua Curitroje-Chontacruz, para conseguirlo, contó con la colaboración de Víctor Polibio Sucunuta, Luis Amable Poma y Segundo Tenezaca: “Hoy en día, esta captación de agua abastece a gran parte de la ciudad de Loja”, relató.

Alumbrado público

Maritza Valverde manifestó que en Santa Inés Bajo hay una sola lámpara que fue arreglada hace poco tiempo. En las noches, el sector permanece en absoluta oscuridad, por lo que los habitantes solicitan la colocación de una red de alumbrado público.

Alcantarillado

Santa Inés sí cuenta con este servicio gracias a la gestión de la directiva. Para su implementación, los moradores tuvieron que comprar la tubería, mientras que las autoridades les ayudaron con la maquinaria.

Los trabajos de alcantarillado iniciaron hace dos años, sin embargo, por motivo de la pandemia la obra se suspendió, por lo que aún no beneficia a todos los hogares.

Maritza Valverde comentó que el único adelanto que ha percibido es el alcantarillado. Pidió a las autoridades mayor participación, con la finalidad de que las necesidades sean resueltas.

Recolector de basura

El poco mantenimiento vial sería el causante para que el carro recolector no acuda a la zona.

Ante la falta de este servicio, los residentes queman gran parte de los desechos inorgánicos, mientras que la basura orgánica es utilizada para abonar los terrenos, donde posteriormente se cultivan productos que sirven de sustento para varias familias de la comunidad: “en este lugar no se admite que la basura se deposite en las calles y que el viento se la lleve”, mencionó José.

Una vez que la vía se encuentre en mejores condiciones, los habitantes piden el ingreso del carro recolector o de alguna camioneta asignada para dicha función.

Otros servicios

A decir de los moradores, el barrio es seguro, puesto que la mayoría de las personas se conocen y mantienen lazos de amistad y cooperación. A lo largo de los años, en Santa Inés Bajo no se han reportado actos antisociales y los residentes esperan que el panorama no cambie.

Con respecto a los terrenos, algunas familias no tienen las escrituras, por lo que piden ayuda al cabildo para que les otorgue este documento: “el municipio nos ofreció ayuda y esperemos que esta se cumpla una vez que tengamos los otros servicios”, concluyó el representante barrial.

El sitio no cuenta con transporte urbano, por lo que las personas deben movilizarse en carros particulares o caminar hasta sectores aledaños donde sí tienen bus, asimismo, la localidad no tiene áreas verdes ni espacios de recreación públicos, por tal motivo, los jóvenes deben visitar otros lugares para acceder a las canchas deportivas.

 

TOME NOTA

Previo a la colocación del alcantarillado, algunos moradores construyeron pozos sépticos para las aguas servidas.

EL DATO

Hace más de 20 años se instaló el servicio de agua potable en Santa Inés Bajo.