En la hacienda Los Alpes, José Luis Minga, junto a su padre Víctor Hugo, mejoran la genética de las reses.
El cantón Saraguro, además de ser tierra de gran potencial natural y herencia cultural milenaria, es hogar de gente trabajadora que se dedica principalmente a actividades agropecuarias y ganaderas. Sus condiciones climáticas permiten que las cordilleras y pastizales permanezcan verdes gran parte del año, lo que incentiva la crianza de animales para la obtención de leche y carne.
Hoy en día, con el avance de la ciencia se han desarrollado múltiples procesos que favorecen al sector agrícola, a fin de incrementar la rentabilidad, calidad y minimizar pérdidas. En este sentido, los ganaderos se han visto altamente beneficiados con innovadores procedimientos que ayudan a mejorar la genética, mediante tratamientos de inseminación artificial, con los que se logra crear una reproducción asistida, rápida y sencilla.
José Luis Minga, junto a su padre Víctor Hugo, se dedican a la ganadería en el cantón Saraguro. Son los propietarios de la hacienda Los Alpes, donde crían ejemplares de alto valor genético, lo que ha posibilitado su participación en importantes concursos a nivel nacional. Los emprendedores ejercen actividades de campo desde hace algunos años, sin embargo, es en el 2019 cuando deciden implementar nuevas técnicas. En la actualidad, trabajan principalmente con las razas Jersey y Ayrshire, las cuales importaron de Colombia.
La raza Jersey es de ascendencia inglesa, originaria en la pequeña isla de Jersey. Es considerada como la segunda raza lechera del mundo. Por su parte, la Ayrshire tiene sus raíces en Escocia y se caracteriza por la elegancia, excelente calidad de ubres, rusticidad y longevidad.
En entrevista con diario La Hora, José Luis Minga cuenta su experiencia como ganadero y adelanta algunos de sus próximos proyectos.
¿Cómo se capacitaron para mejorar la genética de las reses?
La lectura, investigación y experiencia nos ayudó a cumplir con el objetivo. Cuando decidimos optimar la genética de las vacas mediante la inseminación artificial, tuvimos que identificar las mejores razas que se adapten a las condiciones climáticas de la zona sur del país. Otro aspecto que tomamos en cuenta es la geografía de los terrenos, debido a que la provincia de Loja tiene cordilleras y superficies laderosas que podrían significar un peligro para las reses. Dadas estas circunstancias, escogimos dos razas de estatura pequeña y mediana.
¿En qué consiste el proceso de inseminación artificial?
Se basa en introducir una muestra de semen en el útero de la vaca. En nuestra hacienda trabajamos con muestras de Estados Unidos, las cuales son importadas a Ecuador por gestión de algunas empresas.
Este procedimiento se realiza en América Latina desde hace muchos años. En el caso de Ecuador, la inseminación artificial no es muy conocida, asimismo, algunos piensan que afecta a la salud de los animales, cuando en realidad no es así.
Me parece interesante que el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (MAGAP) lidere capacitaciones sobre este tema, ya que permite que en los campos se adopten nuevas alternativas.
¿Es costoso?
Existen dos tipos de muestras: sexadas y convencionales. Las sexadas son costosas, porque luego de la inseminación nacerá una hembra, por lo que su costo unitario bordea los 90 dólares. Por su parte, las convencionales son más económicas, debido a que la vaca puede procrear un toro o vacona. El valor de estas pajillas es de 25 dólares aproximadamente.
¿Cuántos litros de leche extraen de una ejemplar?
En la raza Jersey obtenemos normalmente de 28 a 30 litros, mientras que en la Ayrshire la cantidad asciende hasta los 35 litros, siempre y cuando la ejemplar consuma buen pasto y tenga los cuidados necesarios.
Gracias al mejoramiento de genética logramos que las reses generen una alta producción de leche. Asimismo, complementamos su alimentación con balanceado, para que eleven el porcentaje de proteínas.
¿Cómo proceden con los terneros que nacen?
Cuando son hembras las cuidamos desde pequeñas para que crezcan sanas y robustas, ya que luego se convertirán en vacas de leche. En cambio, a los terneros machos los vendemos a otros ganaderos, quienes los compran para optimar la genética de sus reses.
¿Se esperó obtener el primer lugar en la Expo Feria Cuenca 2021?
Es la primera vez que asistimos. A la exposición, realizada a finales de octubre, llegaron ejemplares de diferentes partes del país, y sentimos una gran emoción cuando nos anunciaron campeones con la raza Jersey, asimismo, quedamos en segundo lugar a nivel de todas las razas.
Con estos reconocimientos nos damos cuenta de que el esfuerzo depositado en los últimos años ha valido la pena. Es así como fortalecemos nuestro compromiso por mejorar la genética y representar a Loja en nuevos concursos.
¿Cuáles son sus objetivos?
Con mi padre deseamos tener nuestros propios cultivos de maíz, con el fin de preparar suplementos para la alimentación del ganado. Esto nos permitirá optimizar recursos y crear fuentes laborales.
En un futuro deseamos trabajar con transferencia de embriones. Es una técnica mediante la cual, los embriones (óvulos fertilizados) son colectados del cuerno uterino de la hembra antes de la nidación (donadora), y transferidos al cuerno uterino de otras hembras para completar su gestación (receptoras).
También tenemos en mente implementar nuestra propia quesera para elaborar algunos derivados de la leche.
TOME NOTA Hacienda Los Alpes abastece con leche a la empresa Quesos Saraguro. EL DATO Desde el 2019, José Luis y su padre se dedican a optimar la genética de las vacas. EXTRACTO “Hay personas que aún tienen miedo de mejorar la genética de los animales, siendo el costo una de las limitantes”
