Fulvio Bautista: “varias vías noroccidentales en el abandono”

CONDICIONES. La vía es mayoritariamente transitada por devotos y comerciantes.

Los moradores solicitan maquinaria para que realice el lastrado, ampliación y apertura de cunetas.

LOJA. Los habitantes del noroccidente de la provincia de Loja se encuentran preocupados por el tema de vialidad, porque los ofrecimientos que hacen las autoridades en campaña política quedan reducidos a simples palabras.

Fulvio Bautista Cuenca, morador de la parroquia de Chuquiribamba, manifiesta que las vías que conectan Gualel, El Cisne y Ambocas están en malas condiciones. Estos sectores han mantenido una comunicación directa desde tiempos inmemorables, debido a la producción y venta de minerales en el vecino cantón de Portovelo, provincia de El Oro.

Fulvio transita constantemente por esta ruta y conoce la difícil situación que enfrentan los pobladores. A su criterio, estos territorios se caracterizan por ser altamente productivos, ya que las personas que los habitan se dedican a la agricultura, ganadería y apicultura, sin embargo, la atención que reciben por parte de los representantes de la Junta Parroquial de El Cisne y del Consejo Provincial de Loja, es prácticamente nula.

Destaca que la maquinaria hace la limpieza de la vía cada tres años, lo que origina malestar en las comunidades afectadas, puesto que en invierno el camino se deteriora considerablemente. Explica que los devotos que acuden todos los años a la parroquia de El Cisne, y aquellas personas que llegan hasta el noroccidente para entablar comercio con Gualel y Chuquiribamba, tienen que movilizarse por la parroquia Saracay, perteneciente al cantón Piñas de la provincia de El Oro, ya que la carretera se encuentra en mejores condiciones. “Esta ruta dura aproximadamente cinco horas. Pero, al hacer el viaje directamente entre Ambocas-Salatí-El Cisne-Gualel-Chuquiribamba, el tiempo se reduce a una hora y media. La situación es crítica, porque se generan más gastos en combustible y aumenta el costo del pasaje”, agrega.

Para el arreglo de la vía, los moradores solicitan insistentemente que se envíe una moto niveladora y una volqueta para que procedan con el lastrado. Cabe destacar que en época de lluvias los vehículos pequeños no pueden circular, debido a que en algunos tramos se forman baches y grietas por falta de cunetas: “es importante que las autoridades tomen cartas en el asunto, para que al menos le den mantenimiento a la carretera en temporada de verano. Esta situación deja mucho que desear de nuestros representantes”, acota.

Ante el mal estado de la vía, los productores tienen inconvenientes para trasladar la cosecha hasta los puntos de expendio, lo que incrementa los precios de comercialización, además, altera directamente la oferta y demanda.

Fulvio menciona que algunas personas de estos sectores han emigrado a territorios aledaños en busca de mejores condiciones de vida, no obstante, serían un aproximado de 200 familias que aún están siendo afectadas: “los moradores están dispuestos a colaborar con la alimentación y hospedaje de los maquinistas, con la finalidad de que acudan y realicen los trabajos correspondientes”, indica.

Para finalizar, instó a las autoridades a que visiten las parroquias noroccidentales y comprueben el deficiente estado de la carretera.

TOME NOTA
En invierno la vía queda intransitable para vehículos pequeños.

EL DATO
El lastrado de la carretera se concluiría en aproximadamente una semana.