¿Es realmente necesaria una tercera dosis anticovid?

¿Es realmente necesaria una tercera dosis anticovid?
PROFESIONAL. Carmen Álvarez cree que se deberían distribuir equitativamente las dosis.

Expertos consideran que lo ideal sería que los países desarrollados exporten vacunas a aquellos que aún no las han recibido.

La tercera ola de coronavirus por la variante delta, el regreso presencial a clases, o la eventual pérdida de efectividad en vacunas de dos dosis, como Pfizer o Moderna, han traído interrogantes sobre si es conveniente una dosis adicional.

En Ecuador, la aplicación del tercer refuerzo empezó oficialmente el jueves de la semana anterior. Según datos del Ministerio de Salud Pública, hasta el 8 de noviembre de 2021, se habían aplicado más de 70.000 dosis de recordatorio. El personal sanitario y adultos de la tercera edad han sido los primeros en recibirla; esto debido a su vulnerabilidad y a que son los primeros grupos que cuentan con la inoculación desde hace seis meses.

¿Es realmente recomendable?

Carmen Álvarez, docente investigadora en Inmunoterapia de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), comenta que con la aparición de las nuevas variantes de la covid-19, es recomendable aplicar una tercera dosis a los adultos mayores, profesionales de la salud, y a otros grupos de riesgo por tener baja respuesta celular, es decir: personas que estén recibiendo tratamiento para el cáncer, pacientes bajo uso de medicamentos con corticoesteroides a dosis altas, personas que tengan infección de VIH en descontrol o en etapas avanzadas, aquellos que hayan sido receptores de un trasplante, y personas que estén bajo algún tipo de régimen inmunosupresor por alguna enfermedad como reumatológica estilo lupus, artritis reumatoide, entre otras.

La experta menciona que debería analizarse la posibilidad de colocar una dosis de refuerzo a la población en general, sin embargo, considera que en caso de surgir nuevas sepas de coronavirus, sería una medida adecuada para evitar la propagación, ya que el organismo tendrá más anticuerpos: “creo que aún es muy pronto para inocular a todos con una dosis de recuerdo o booster en inglés; pienso que este proceso se debe realizar el próximo año, siempre y cuando sea necesario”, agrega.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha solicitado a los países desarrollados no aplicar una tercera vacuna, con el fin de que los fármacos sean exportados a regiones desatendidas, no obstante, el proceso se cumple con normalidad e incertidumbre en varios países.

Virus endémico

Carmen manifiesta que la pandemia de la covid-19 le dejó a la humanidad un virus endémico que podrá ser tratado como una gripe normal. Indica que los fármacos creados hasta el momento minimizan la tasa de hospitalización y mortalidad, más no eliminan la infección de raíz.

Dada esta situación, es probable que las personas que pertenecen a grupos de riesgo requieran de una dosis anual, caso contrario, el virus puede ser contraído y provocar quebrantos de salud.

Distribución equitativa

La profesional en Inmunoterapia comenta que lo ideal sería que los países desarrollados exporten vacunas a aquellos territorios que aún no las han recibido, con el objetivo de que toda la población acceda a las primeras y segundas dosis, sin embargo, considera que hay limitantes que impiden lograrlo. Destaca que algunos países africanos no cuentan con los congeladores apropiados para mantener en condiciones óptimas a ciertas vacunas, por lo que farmacéuticas como Pfizer y Moderna han decidido instalarse en varios países del Norte de África, con el propósito de que el compuesto sea distribuido entre los habitantes.

Aplicación de dosis diferente

Previo a la aplicación una tercera dosis, investigadores realizaron ensayos clínicos, con la finalidad de comprobar la efectividad que se obtendría al mezclar vacunas fabricadas por diferentes empresas. Carmen señala que los resultaron obtenidos de un estudio efectuado con 4.800 voluntarios, demuestran que las combinaciones AstraZeneca, Pfizer o Moderna son aconsejables, al igual que Janssen con Pfizer, incluso para primera y segunda aplicación.

Pare este análisis, los científicos trabajaron con un número inferior de voluntarios, en comparación al estudio realizado en el 2020, cuando se comprobó la seguridad y eficacia del compuesto previo a ser distribuido a nivel global: “pienso que a cantidad de personas que participaron del estudio son suficientes para llegar a una conclusión, la cual es favorable”, argumenta.

Al colocar la vacuna de refuerzo, es recomendable que hayan transcurrido seis meses desde la primera dosis, para que el booster genere mayor cantidad de anticuerpos contra cierta infección o padecimiento.

Fines lucrativos

Sin lugar a duda, las farmacéuticas incrementaron exponencialmente sus ingresos durante la pandemia, y lo continúan haciendo. La aplicación de un tercer refuerzo significa nuevos millones de dólares que fortalecerán aún más su economía.

Algunos sectores sociales consideran que estas empresas aprovechan la situación para lucrarse, independientemente de la inmunidad que aporte una tercera dosis. Carmen Álvarez manifiesta que la obtención de beneficios económicos es innegable, ya que mientras más medicinas sean comercializadas, mayores son las ganancias.

TOME NOTA
En Ecuador, la vacunación de refuerzo no tiene una fecha de finalización.

EL DATO 
Según la OMS, en algunas regiones del mundo el porcentaje de personas inmunizadas aún no alcanza el 10% de la población.