Existe preocupación en América Latina y el Caribe, especialmente de las mujeres, por los obstáculos que impiden su incorporación en igualdad de condiciones a todos los espacios de vida social, cultural y económica en cada uno de sus países. En los últimos años, donde el discurso feminista cada vez es más fuerte, se ha escuchado a los participantes políticos hablar de prioridad a las mujeres en planes educativos o de empleo, igualdad en los cargos de gobierno, sistema de cuidado y seguridad, iniciativas para hacer frente a la violencia de género, etc.
En el Ecuador actual son muy pocas las mujeres que se desempeñan en altos cargos de gobierno, cuando el Código de la Democracia, establece una cuota progresiva de candidatas en las listas pluripersonales: 15% en 2021, 30%: 2023 y 50%: 2025, sin embargo, el país no cuenta con un organismo que controle esta norma.
Según datos de la Fundación Haciendo Ecuador y del Observatorio Nacional de la Participación Política de la Mujer, de los 18 Ministerios del Ejecutivo, 13 están bajo el mando de hombres y solo cinco a cargo de mujeres; de 137 legisladores de la Asamblea Nacional, solo 53 son mujeres, es decir un 38,69%.
El presidente Guillermo Lasso ha movido autoridades en seis ministerios y una secretaría, durante este 2022. También creó la Secretaría Anticorrupción y dos consejerías: una de ambiente (ad honorem) y la de Política. Solo una mujer fue considerada dentro de esos cambios. La equidad de género en el Gabinete aún es lejana.
Gobierno de Guillermo Lasso
Casi un año se cumple desde que Guillermo Lasso asumió la presidencia del Ecuador, si bien la equidad de género para su Gabinete no protagonizó su campaña, en su discurso de posesión como presidente, mientras evocaba el legado democrático de Jaime Roldós dijo que “La lucha por la igualdad de género no es un problema solo de las mujeres. Es un problema nacional. Un problema ecuatoriano que debe ser abordado por el Gobierno”.
Además, en junio de 2021 se comprometió con ONU Mujeres a potenciar una serie de políticas públicas para erradicar la violencia de género, ofrecer mayor apoyo económico y empoderarlas dentro de su gobierno. Pero en los casi 365 días, la equidad de género en su mandato parece lejana.
Luego de la división de la Cartera de Gobierno, el Ejecutivo cuenta con 19 ministerios de los cuales quince son liderados por hombres y solamente cuatro mujeres: Cultura, Salud, Educación Y Telecomunicaciones.
La periodista y feminista Narcisa Sinche, menciona que la participación de las mujeres dentro del gabinete ha incrementado a lo largo de los años, pero con cifras mínimas que no le hacen justifica a la capacidad de liderazgo del género femenino. Insiste en la falta de una ley para que regule la equidad cuando de cargos de gobierno se trata.
“En nuestros gobiernos siempre ha pasado que los cargos de las mujeres son de mediana o baja injerencia política, estas designaciones están basadas en estereotipos de género que promueven una discriminación”, acota.
Loja
En la provincia de Loja, específicamente la Gobernación cuenta con solo cuatro jefas políticas en toda la circunscripción; la Prefectura tiene viceprefecta; de los 16 cantones, la Alcaldía es ocupada por dos mujeres y una aún lucha para que se le dé el cargo que legalmente le corresponde (Paltas).
Para la periodista, la situación es preocupante desde cuando inicia la campaña electoral de un partido, ya que es evidente que muchas veces los líderes de los partidos políticos toman en cuenta a las mujeres para rellenar la papeleta y ganar más voto, una vez en el cargo son los hombres quienes toman las decisiones importantes.
“Es importante que las mujeres de Loja y del país hagamos una lectura histórica de la instrumentalización por parte de los partidos políticos. Hay una deuda y debate pendiente porque nos sentimos desilusionadas que compañeras que han sido buscadas para participar, y que recibieron nuestro apoyo, le han dado la espalda al movimiento de mujeres”.
Asegura que es necesaria la existencia de una agenda feminista, caso contrario el movimiento solo ha sido tomado para ganar cierta fama en vista de que es de los sectores que cada vez cobra más fuerza en su lucha.
¿Qué podemos hacer para encaminarnos a la equidad de género?
“Un cambio total a la estructura de gobierno y que los ecuatorianos exijamos más igualdad y paridad de género, si no lo hacemos, poco o nada hará el ejecutivo. Ya lo hemos visto, los líderes se han disfrazado de líneas ideológicas para convencer al pueblo, pero sus prácticas obedecen al conservadurismo, discriminación y estigmatización de las mujeres, es la sociedad civil la que debe exigir el cambio”, agrega.
También es vital la feminización de la política que “busca construir una agenda política feminista, escuchando a todas las voces que han sido minimizadas y trabajar por una vida digna que merezca ser vivida tanto para hombres como para mujeres”, asimismo se debe destacar la labor de las mujeres de las comunidades indígenas, quienes son un referente en la feminización de la política por su forma de organización, misma que demuestra que una buena forma de ejercer la política funciona y beneficia a todos.