“Las preguntas están muy bien planteadas, las entiendo perfectamente, pero ahora hay que preguntarnos ¿los ecuatorianos las entendemos bien a las preguntas?”, reflexiona el investigador Pablo Ortiz, sobre las 8 preguntas que plantea el Presidente Guillermo Lasso en la consulta popular de febrero de 2023.
Pablo Ortiz, al referirse sobre la extradición de individuos que tienen antecedentes por crimen organizado, por narcotráfico y otros delitos transnacionales, se sorprende que todavía tenga el 25% de ecuatorianos que están en contra; “me parece inaudito”, por ello cree que el Ecuador ante la realidad que vive dicha pregunta debería tener un 100% rotundo.
En el programa Expresión Polítika, que se transmite por radio Planeta 106.1 F.M., SR. Radio y Diario La Hora, hemos analizado las 8 preguntas de la consulta popular con diferentes ciudadanos de la provincia de Loja y país, por ellos consideramos que la reforma política debe empoderarse al ciudadano y poder encausar correctamente la doctrina y principalmente la oratoria política de un pueblo, de un territorio y no fundamentarlo en lo que es actualmente los partidos y movimientos políticos.
Pablo Ortiz determina que la consulta es directamente al ciudadano y no a los asambleístas, porque la mayoría queremos cambios estructurales en la constitución.
Democratizar los partidos
El presidente dice ‘narcopolítica’ y hace referencia directamente a los partidos políticos vigentes en Ecuador, además, observa la debilidad del Código de la Democracia, sostiene Pablo Sanmartín Rodríguez, director del programa Expresión Polítika.
Recuerda que los dirigentes de los partidos políticos no han salido a desmentir y decir que su partido o movimiento político tiene esas consideraciones o son simplemente partidos que integran la democracia del Ecuador, ninguno desmiente esa aseveración y más bien están en silencio y el silencio en este caso es totalmente cómplice.
Soraya Tandazo, activista política, expresa que por dignidad y por honor cada uno de los candidatos, incluso hasta los suplentes y directores de partidos políticos, tienen que salir a decir “estas son y van a ser mis fuentes de financiamiento para la presente campaña electoral y consagrar esa parte política, el honor, la credibilidad”.
Argumenta que los integrantes del Consejo Nacional Electoral también entran en duda, no en la parte administrativa ni la parte de cómo están operando el día de hoy, si no es la cuestión de honor de cada consejero en revisar la documentación personal y social de los aspirantes a candidatos.
Pablo Sanmartín Rodríguez sostiene que el Código de la Democracia prácticamente entra a una reforma profunda, por el simple hecho de que no hay legislación o articulado que permita consagrar la verdadera participación política en el país.