Andrea Jiménez: mujer que inspira y motiva masas

ARTISTA. La música es una de sus pasiones de la talentosa lojana

La mujer lojana es símbolo de trabajo, esfuerzo y dedicación. Su participación marca precedentes y deja huellas imborrables.

Andrea físicamente es de cabello largo y negro, tez blanca, cejas bien definidas, una sonrisa agradable. Desde su nacimiento padece de glaucoma congénito, una enfermedad que daña progresivamente el nervio óptico y por lo tanto no recibe información visual.

Su madre, Blanca Jiménez, cuenta que la tuvo cuando contaba poco más de 18 años. Sin embargo, aquello no fue un impedimento para continuar con sus estudios: “Terminé el bachillerato con cuatro meses de embarazo; situación que me llevó a salir de casa de mis padres en busca de un trabajo que me permitiese prepararme para la llegada de mi pequeña, y aunque se me partía el alma dejar a mi familia, amigos, a mi pueblo natal Jimbura, debía hacerlo porque quería días mejores para las dos.”

Su historia siempre me pareció interesante, motivo por el que me contacté con ella para que me acepte una pequeña plática. En un principio pensé que se negaría, pero cuando escuché su respuesta preguntándome ¿cuándo?, sentí una gran emoción el hecho de aceptar la conversación. Después de varios cruces de mensajes por WhatsApp, entablamos confianza y acordamos una charla.

Su madre recuerda cómo los 20 días que sucedieron a su nacimiento fueron confusos y llenos de incertidumbre, pues la pequeña debía ser operada de emergencia por su condición y para ello debieron trasladarse a la ciudad de Quito.

Durante el tiempo que estuvieron internadas en el hospital Eugenio Espejo le cantó canciones, le contaba cuentos, le hablaba de la familia, prometiendo que no se apartaría de ella y que lucharía incansablemente para educarla y verla convertida en una mujer grande y exitosa, pese a todas las dificultades.

Los años siguientes no fueron para nada sencillos. Blanca tomó la firme decisión de continuar con sus estudios superiores, para lo cual debía intensificar su jornada de trabajo entre el cuidado de la niña, los quehaceres domésticos, confección de prendas de vestir y otras manualidades a las que se dedicaba para pagar su licenciatura en Idiomas en la Universidad Nacional de Loja y el constante tratamiento de la pequeña.

Afección

Su pérdida de visión es progresiva. Ella recuerda que hasta su adolescencia pudo distinguir lo que estaba a su alrededor. Hoy se guía por los colores fuertes, la forma de las cosas y los tonos de voz. Y claro, usa un bastón blanco para determinar las distancias.

Desde muy pequeña sus inspiraciones en el canto fueron Ana Gabriel y Maricela, artistas que su madre escuchaba y que de a poco tomaron influencia en la talentosa lojana, además, asegura que los primeros pasos que dio en la música fueron con interpretaciones realizadas a canciones de las artistas ya mencionadas.

Desde temprana edad la trayectoria académica y artística de Andrea atrajo la atención de medios locales. En ellos destacan su dedicación y entrega en todo lo que hace y vive. Estudió en el Instituto para Ciegos Byron Eguiguren, en donde fue electa abanderada del Pabellón Nacional 2008/2009 y seis años más tarde repitió la misma hazaña en la Unidad Educativa La Inmaculada, siendo la portadora del Pabellón Nacional.

Condición

Cuando naces con una discapacidad lo primero que debes hacer es asumir que tienes una dificultad y saber exactamente lo que puedes y lo que no. “Ahí empiezas a construir tu vida, tus metas y tus sueños”, comenta con esa seguridad que la ha caracterizado siempre.

Sin embargo, no es oro todo lo que reluce, y esta joven que parece llevarse por delante todo lo que le pongan, también tiene sus propias batallas. Silenciosa, irrefutable y fatal; así describe el glaucoma que le afecta desde su nacimiento y que, en etapas avanzadas, en su caso desde los 15 años, genera un dolor crónico similar a la migraña. “El dolor se ha convertido en un ruido de fondo en mi vida”, dice serena al ser cuestionada por la manera en la que gestiona esta condición que afecta en el mundo a las personas y que por el momento no tiene cura conocida. “La mayor parte del tiempo es lo suficientemente fuerte como para recordarme que la vida vale la pena ser vivida. Mi mejor medicina siempre han sido las letras y la música”.

Triunfo

En 2008 representó a la provincia de Loja, obteniendo el segundo lugar en el ámbito nacional en el Festival de cuentos “Más allá de las palabras”. Alcanzó el primer lugar en el ‘Festival de la canción de personas con discapacidad’, organizado por el MIES en 2009 y un año más tarde fue artista invitada en la segunda edición de este mismo festival.

En el año 2010 obtuvo variados reconocimientos y visibilidad mediática luego de haber ganado un concurso de oratoria acerca de la vida y obra de la ilustre lojana Matilde Hidalgo de Procel. Además, participó en la edición número 23 del Festival “Marcos Ochoa Muñoz” en el año 2011 y fue parte del disco recopilatorio de artistas lojanos llevado a cabo por el MIES en 2012.

“Con Matilde tengo una relación muy especial. Su educación fue un acto de rebeldía, por el hecho de ser mujer; y casi 100 años después la mía también lo es, porque además de tener su mismo sexo tengo una discapacidad. Felizmente al igual que ella, tengo también una gran familia que me ha apoyado”, sostiene.

Inclusión

Ella se refiere al momento en el que tras haber cursado la educación básica en educación especial decide incursionar en la educación regular. “Sus calificaciones eran excelentes; el único pero que me pusieron cuando fui a matricularla en La Inmaculada, era la falta de experiencia en el manejo de estudiantes con discapacidad visual. Yo les dije que cuando la tuve tampoco tenía experiencia alguna, así que opté por aprender con ella y de ella”, menciona orgullosa la madre de Andrea.

El resultado fue que en representación de este colegio continuó cosechando éxitos. Tuvo una notable participación en el Festival de libro Leído Carlos Carrión en el marco del Mes del Estudiante 2013 y como artista invitada en la edición 184 de la Feria de Loja. Además, en el concurso del ‘Libro leído Manuela Sáenz’ organizado por la UNL, en el que alcanzó el segundo lugar en 2014. Fue artista invitada en la IV edición del festival Loja sobre Tablas, y luego en la primera edición del Festival de Artes Vivas Loja 2016.

Su amor por la comunicación surge indirectamente de su dedicación a la literatura y la música. “Sentía que una carrera así complementaría muchos de mis intereses, y tras haberme graduado he podido constatar que efectivamente ha sido así”. En 2015 ingresa a la Universidad Técnica Particular de Loja, en donde además de conocimientos tuvo la oportunidad de gozar de grandes amistades y nuevamente el apoyo incondicional de los docentes, familia y amigos.

“No quisiera pasar por alto el apoyo brindado por autoridades, docentes y compañeros de UTPL, quienes en todo momento confiaron plenamente en mí y supieron brindarme las herramientas necesarias para hacer este sueño posible”; puntualiza orgullosa. “De igual manera a mi familia por su tiempo y dedicación durante mi formación profesional”, añade.

Mejor estudiante

Durante los meses de enero y febrero de 2020 formó parte del equipo de estudiantes utepelinos que intervino el Museo Matilde Hidalgo de Procel añadiéndole ciertos elementos de accesibilidad e interactividad. Posteriormente en mayo fue declarada la Mejor Estudiante de Comunicación Social (Modalidad Presencial), distinción que reconoce al estudiante más destacado de su promoción.

De sus años como universitaria le quedó aquel gusto por temáticas sociales, las cuales abordó desde esa particular manera de ver la vida, tras haberse convertido en la excepción a la regla; “una regla que dice que las mujeres con discapacidad son poco deseables o autónomas?; ¿y quién inventó esa regla?”, se pregunta indignada. “Aunque te parezca irónico, yo sueño con el día en el que una mujer con discapacidad que estudia y se supera no sea noticia, porque todas lo estarían haciendo”.

Tan convencida está de que ese día llegará que actualmente es directora local de Talento Humano para Aiesec en UTPL; una ONG que se dedica a promover el liderazgo juvenil a partir de encuentros internacionales. “Básicamente lo que hacemos en esta organización es formar ciudadanos del mundo; gente que termina por entender cómo puede contribuir a que ese sueño de un mudo más verde y más justo se convierta en una realidad”, enfatiza.

Esta ONG está presente en 114 países, haciendo cerca de 03000 intercambios al año, basando sus proyectos en los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible promulgados por la ONU. N el comité que trabaja para Loja ella maneja un equipo de 11 personas, todos menores de 30 años, pues Aiesec es la única Organización a nivel internacional liderada por jóvenes y creada para los jóvenes.

“Mi familia, amigos; el entorno en el que vivo ha sido realmente una bendición, y personalmente considero que a las bendiciones no solo se las agradece, sino que se las debe compartir; por eso me sumé a Aiesec y por eso invito a más personas que se unan en comunidad. Yo no creo tener nada especial, solamente me rodié de las personas correctas”; finaliza orgullosa.

TOME NOTA

Andrea se encuentra trabajando en una ONG, por lo que le gustaría que más personas se sumen a la misma. La dirección de la ONG es: https://www.aiesec.org.ec/voluntarios/

EL DATO

Entre el año 2008 y 2009 estudió música con la soprano, Esthela Betancourt, con quien aprendió acerca de este arte auditivo.

EXTRACTO

“Mi sueño cumplido sería el poder ejercer el periodismo y el canto porque soy aficionada de ambas cosas”