Aguas servidas del barrio Santa Inés desembocan en una quebrada

MORADORA. Carmen Matailo reside en Santa Inés por 40 años.

Ante la falta de alcantarillado, los moradores instalaron tuberías que desaguan en la quebrada Shushuhuayco.

 

Santa Inés segunda etapa es un sector ubicado a pocos metros del barrio Chontacruz. En la localidad residen al menos 100 familias que solicitan mayor atención en lo que concierne a inversión pública, puesto que presentan algunas necesidades que esperan ser resueltas por aquellas personas que eligieron como sus representantes.

Los moradores que viven a la entrada de la comunidad tienen mayores beneficios, no obstante, quienes habitan algunas cuadras más adelante, carecen de varios servicios como alcantarillado, atención vial, recolección de basura, entre otros.

Vialidad

Juan María Sánchez es el actual vicepresidente del barrio. Manifestó que en administraciones anteriores la carretera sí recibía mayor atención, no obstante, las actuales autoridades se han olvidado de Santa Inés: “en conjunto con la directiva presentamos la documentación, pero lo único que nos responden es que no tienen plata”, señaló.

La vía fue lastrada hace algunos años, sin embargo, las fuertes lluvias y la constante circulación vehicular, han deteriorado su estado, incluso, se originaron deslizamientos de tierra.

Los moradores también reclaman por las cunetas, ya que las aguas inundan la carretera y en algunas ocasiones han ingresado a varios domicilios: “el invierno originó derrumbes y el desplome de casas”, mencionó Carmen Matailo y, recalcó que a lo largo de sus 40 años no ha percibido adelantos significativos en la zona.

El vicepresidente del barrio manifestó que las intensas lluvias que se reportaron en Loja hace varios meses, ocasionaron graves daños en las calles, por lo que como perjudicados presentaron su inconformidad al cabildo, sin embargo, los esfuerzos realizados fueron en vano. Al no recibir respuesta de las autoridades, los pobladores pagaron maquinaria particular, con el fin de que realice los trabajos de limpieza y reconstrucción parcial de la carretera, ya que, de lo contrario, la vía continuaría devastada y la movilización sería un verdadero reto.

Las insistencias y reclamos presentados por las familias dieron sus resultados, puesto que un representante del Municipio de Loja acudiría este jueves 27 de mayo del 2021, a ofrecer soluciones en lo que concierne a vialidad y alcantarillado.

Alcantarillado

El sector no cuenta con este importante beneficio. Los moradores han identificado en la instalación de tuberías una alternativa que les permite deshacerse de las aguas servidas. Estas tuberías desembocan en la quebrada Shushuhuayco, produciéndose una fuerte contaminación ambiental de la que no siempre son conscientes.

Juan Sánchez indicó que varias familias de la localidad han optado por pozos sépticos, sin embargo, estos provocarían los deslizamientos de tierra, y por consecuente, se ponen en peligro los domicilios de varios habitantes. En su caso particular, mencionó que los pozos sépticos no son la solución, debido a que gran parte del terreno está conformado por laderas sobre las que se levantan construcciones.

Por su parte, Carmen Matailo expuso que ante la falta de alcantarillado no tienen más opción que arrojar las aguas servidas a la quebrada. Esta madre de familia pidió mayor atención al municipio y espera que los ofrecimientos realizados se hagan realidad.

Transporte urbano

Moradores señalan que el bus únicamente llegaba hasta la urbanización Lote Bonito, no obstante, con la llegada de la pandemia y la suspensión de actividades presenciales, especialmente en centros educativos, este servicio decidió suspender su recorrido, el mismo que no se reactivaría hasta la fecha: “sería importante que el transporte urbano acuda a esta zona porque hay personas mayores que realizan compras y deben cargarlas al hombro hasta la casa”, sostuvo Juan Sánchez.

Recolector de basura

El carro recolector visita Santa Inés los martes y jueves. El desconocimiento de algunos moradores con respecto a los horarios de su recorrido provocaría que depositen los desechos en lugares inapropiados, originándose malos olores y mayor contaminación al entorno.

Carmen Matailo comentó que el basurero no llega todas las semanas y solicitó mayor compromiso a quienes están a cargo de la administración local.

Escrituras

La mayoría de los terrenos de Santa Inés no tienen escrituras, puesto que las autoridades los consideran como zona de riesgo. Los residentes continúan en su constante lucha por obtener la documentación pertinente que les garantice el ser propietarios de sus viviendas. Por el momento, deben continuar a la espera y desean con ansias que esta situación llegue a su fin.

Otros servicios

Con respecto a seguridad, el sector es calificado por sus moradores como un sitio seguro, asimismo, afirman que se protegen entre ellos y denuncian inmediatamente aquellos casos antisociales que ocurren con escasa frecuencia.

El barrio sí tiene agua potable y se beneficia con la planta de Curitroje-Chontacruz.

 

TOME NOTA:

Los pobladores piden lastre de buena calidad que resista a la temporada invernal.

EL DATO:

El último lastrado de la vía se realizó hace tres años.