REDACCIÓN IMBABURA
Anita Reyna junto a Daniel Almeida, estuvieron en Madrid-España desde mayo del 2019, estudiando un posgrado. Su regreso lo tenían planificado para el 20 de marzo de este año, pero el mismo fue cancelado debido a la situación del Covid-19 y tuvieron que esperar vuelos humanitarios para volver a Ecuador.
Anita relata que ellos vivían en pleno centro de Madrid y que cuando se presentó el virus en España, tomaron precauciones y decidieron no salir del departamento salvo para la compra de víveres con el fin de proteger sus vidas.
Actualmente Madrid es la ciudad más golpeada del país por el Covid-19, de los 6.116 muertos que existen hasta la fecha, 2.757 se concentran en esta región.
Según Anita, la cuarentena inició el 14 de marzo en toda España, pero en Madrid se inició unos días antes debido a que ya varias instituciones cerraron sus puertas, porque el mayor índice de casos se concentraba en este lugar.
Vivencias
La cuarentena en Madrid fue fuerte, explica que como la gente no acataba las medidas, a las autoridades les tocó poner multas a los ciudadanos que salían de sus hogares, la mínima era el pago de 600 euros. En lo que refiere a alimentación indica que al inicio les iban a dejar a sus hogares, pero luego sólo una persona podía hacerlo por familia.
Conforme pasaron los días, la ciudadanía ya tuvo más compromiso por salvar sus vidas estando en casa y una forma de darse ánimo fue salir a los balcones a dar aplausos. “Eso fue muy bonito y eso hizo un poco más ameno vivir el día a día en la cuarentena”, dice.
Pero también aclara que se sufría de tensión, por qué las cifras de contagios iban en aumento en Madrid así como los fallecidos. Hasta el día que regresaron, 27 de marzo, había más de 50 mil casos en toda España y más del 50% correspondía a Madrid.
Constantemente eran las llamadas con sus familiares de Ecuador, para informar cómo se encontraban. Indica que para las autoridades ya les resultaba difícil controlar el aumento de casos, incluso se cerraron varios cementerios de Madrid porque ya no tenían los insumos para tratar los cuerpos y movilizarlos.
Retorno
Por la situación complicada y el miedo constante que tenían, ya querían regresar a su país el 20 de marzo como fue planificado. Sin embargo, tuvieron una llamada para ser informados que el vuelo fue cancelado por el cierre de fronteras de Ecuador. Ante esto se comunicaron inmediatamente con el consulado de Ecuador, y desde aquí les informaron que habría vuelos humanitarios para el 27 y 29 de marzo.
El 26 de marzo, se volvieron a contactar para gestionar su regreso a Ecuador, al día siguiente, en el primero vuelo humanitario, el cual incluso se enteraron por los medios de comunicación de Ecuador que no tendría ningún costo.
Pero, se llevaron una sorpresa que debían pagar por su regreso al país. Según Anita, cada pasajero tuvo que pagar más de 330 euros por el pasaje, sin contar el costo de las maletas, que en total pagaron como 450 euros.
Viaje
El traslado desde su departamento hasta el aeropuerto de Madrid, fue con medidas de seguridad óptimas. Anita junto a su pareja, viajaron en una buseta, al llegar al aeropuerto abordaron un avión que tenía capacidad para 300 personas, pero solo 60 viajarían en este como medida de prevención.
Para Anita estas medidas se vinieron abajo, cuando llegaron al aeropuerto de Quito, ayer a eso de las 18:30. No se les facilitó ni mascarillas ni guantes, mucho menos alcohol para las manos. Solo les tomaron la tempera. Varias de las personas que llegaron, les obligaron a subirse en un mismo bus.
“Todo se arruinó en ese momento, nos suben en un bus a muchísimas personas, nuestras maletas en un solo camión, no me parece justo”.
Una vez en el bus, se realizó el recorrido a los lugares donde debían permanecer su cuarentena. Sin embargo, Anita comenta que esto fue lo peor de su regreso, tuvieron que soportar malos tratos hasta las 01:00 de hoy, porque ningún hotel quería hacerse responsable y que la única opción para poder hospedarse era que debían pagar 1.400 dólares por los 14 días y un adicional de valores por la alimentación.
Al estar indignados por esta situación, solicitaron otra alternativa a quienes los estaban trasladando, sin embargo, les respondieron que les llevarían a unos galpones en Tambillo, adoptados para hombres y mujeres, y que además debían buscar quien les provea de alimentos. Esto generó más malestar de los pasajeros, y tomaron la decisión de no subirse en el bus hasta que les den solución.
Por último, les llevaron a un hostal a los últimos que faltaban hospedarse. De acuerdo a Anita, este hostal lamentablemente no cumple con las medidas de sanidad necesaria, como limpieza adecuada o servicios de lavado. Por otro lado, desde las 18:00 de ayer, recién hoy a las 11:00 tuvieron acceso para poder alimentarse.
Y esto es algo que le preocupa a Anita y a su pareja, debido a que ella por su estado de embarazo debe tener una correcta alimentación. Para esto ellos ya tenían preparado un departamento en Quito para pasar la cuarentena, pero no se les permitió.
“‘Me pregunto de qué apoyo a los ecuatorianos que regresan al país se habla. Nosotros mismo debemos costear los vuelos, nos obligan a pagar valores ilógicos por cuarentena. Ni siquiera es apoyo psicológico cuando te reciben como si fueses un convicto que ingresa y no alguien que busca refugio en su propio país”, comenta Anita.
Hasta la fecha en Ecuador existen 1.835 personas que tienen Covid-19, 48 personas fallecidas. Para Anita, la situación del Covid-19, puede ser controlable, siempre y cuando la ciudadanía colabore y se quede en casa.
El toque de queda, cierre de locales, la suspensión de transporte, han sido positivas para el país. Anita explica que en España este tipo de medidas se las hizo ya cuando había 6.000 contagios. “Siendo demasiado tarde reducir los contagios en esa etapa”, concluye. (FCDL)
DATO
Una verdadera odisea tuvieron que pasar migrantes ecuatorianos que retornaron de España ayer. Cumplirán aislamiento domiciliario en Quito.
