Grupos de amigos y familiares coparon los bares del sector, donde pudieron disfrutar del partido final en vivo.
Redacción IBARRA
Desde las 15:00 del sábado, varios ciudadanos dejaron sus actividades de lado para dedicarse a ver la final de la Copa Sudamericana. El sitio escogido para la ocasión fueron los bares ubicados en la avenida Atahualpa. Ahí, de a poco, empezaron a llegar los ibarreños para no disfrutar del partido y alentar al equipo ecuatoriano Independe del Valle, que se enfrentaba a Colón de Argentina.
A las 15:30, cuando inició el encuentro deportivo, los bares que habían colocado pantallas gigantes, lucían llenos y la gente empezó a comprar diferentes productos. Roberto Dávila, por ejemplo, era un ciudadano que llegó al lugar con sus amigos para distraerse un poco. “Es bueno que hayan puesto el fútbol aquí porque en la casa no tengo cable. Entonces, vine con mis amigos a ver el encuentro y a disfrutar”, dijo.
Mientras que Daniel Mercado, que trabajaba en un local comercial del sector, dijo que estos eventos son indispensables porque ayudan a recuperar la economía. “Como perdimos dinero por los días del feriado, por lo menos hoy recuperamos algo la plata. Por eso, pusimos combos y ofertas para que la gente haga el gasto”.
Momentos inolvidables
Las personas que estuvieron disfrutando del encuentro, vivieron puntos de clímax a lo largo del partido, que se manifestó en la euforia de sus gritos y cánticos. El primero fue cuando inició el cotejo, donde muchas personas gritaron “viva el Ecuador” y “vamos Independiente del Valle”. El segundo momento fue cuando, en el minuto 25, cuando después de un tiro libre, Luis Fernando León anotó el primer gol de cabeza.
Con el tiempo transcurrido y los nervios que aumentaban, llegó el minuto 42. Después de arrancar por la banda izquierda, Jhon Jairo Sánchez anotó la segunda anotación y desató los aplausos y abrazos de la gente. Carlos Narváez, por ejemplo, se abrazó dentro del local comercial con sus amigos y se le soltaron un par de lágrimas. “Este momento es único. Ya solo faltan 45 minutos y Ecuador tendrá su campeón internacional”, dijo.
Iniciado el segundo tiempo, las personas siguieron disfrutan intensamente el partido. Pero, el sufrimiento apareció cerca del final, cuando Colón descontó el marcador con un gol. Con 7 minutos de adición, los clientes que estaban en los locales de la avenida Atahualpa sufrían y reclamaban que ya culminé el encuentro. No querían que le igualen a Independiente. Sin embargo, en el último minuto, el equipo de Sangolquí hizo un contragolpe letal y desató la algarabía por el gol del campeonato. La gente se abrazó, saltó y lloró porque por segunda vez, un equipo ecuatoriano brilla en todo el continente. (PTEG)
Dato
Los locales adecuaron pantallas gigantes a sus negocios para que la gente pueda disfrutar del encuentro deportivo.
Grupos de amigos y familiares coparon los bares del sector, donde pudieron disfrutar del partido final en vivo.
Redacción IBARRA
Desde las 15:00 del sábado, varios ciudadanos dejaron sus actividades de lado para dedicarse a ver la final de la Copa Sudamericana. El sitio escogido para la ocasión fueron los bares ubicados en la avenida Atahualpa. Ahí, de a poco, empezaron a llegar los ibarreños para no disfrutar del partido y alentar al equipo ecuatoriano Independe del Valle, que se enfrentaba a Colón de Argentina.
A las 15:30, cuando inició el encuentro deportivo, los bares que habían colocado pantallas gigantes, lucían llenos y la gente empezó a comprar diferentes productos. Roberto Dávila, por ejemplo, era un ciudadano que llegó al lugar con sus amigos para distraerse un poco. “Es bueno que hayan puesto el fútbol aquí porque en la casa no tengo cable. Entonces, vine con mis amigos a ver el encuentro y a disfrutar”, dijo.
Mientras que Daniel Mercado, que trabajaba en un local comercial del sector, dijo que estos eventos son indispensables porque ayudan a recuperar la economía. “Como perdimos dinero por los días del feriado, por lo menos hoy recuperamos algo la plata. Por eso, pusimos combos y ofertas para que la gente haga el gasto”.
Momentos inolvidables
Las personas que estuvieron disfrutando del encuentro, vivieron puntos de clímax a lo largo del partido, que se manifestó en la euforia de sus gritos y cánticos. El primero fue cuando inició el cotejo, donde muchas personas gritaron “viva el Ecuador” y “vamos Independiente del Valle”. El segundo momento fue cuando, en el minuto 25, cuando después de un tiro libre, Luis Fernando León anotó el primer gol de cabeza.
Con el tiempo transcurrido y los nervios que aumentaban, llegó el minuto 42. Después de arrancar por la banda izquierda, Jhon Jairo Sánchez anotó la segunda anotación y desató los aplausos y abrazos de la gente. Carlos Narváez, por ejemplo, se abrazó dentro del local comercial con sus amigos y se le soltaron un par de lágrimas. “Este momento es único. Ya solo faltan 45 minutos y Ecuador tendrá su campeón internacional”, dijo.
Iniciado el segundo tiempo, las personas siguieron disfrutan intensamente el partido. Pero, el sufrimiento apareció cerca del final, cuando Colón descontó el marcador con un gol. Con 7 minutos de adición, los clientes que estaban en los locales de la avenida Atahualpa sufrían y reclamaban que ya culminé el encuentro. No querían que le igualen a Independiente. Sin embargo, en el último minuto, el equipo de Sangolquí hizo un contragolpe letal y desató la algarabía por el gol del campeonato. La gente se abrazó, saltó y lloró porque por segunda vez, un equipo ecuatoriano brilla en todo el continente. (PTEG)
Dato
Los locales adecuaron pantallas gigantes a sus negocios para que la gente pueda disfrutar del encuentro deportivo.
Grupos de amigos y familiares coparon los bares del sector, donde pudieron disfrutar del partido final en vivo.
Redacción IBARRA
Desde las 15:00 del sábado, varios ciudadanos dejaron sus actividades de lado para dedicarse a ver la final de la Copa Sudamericana. El sitio escogido para la ocasión fueron los bares ubicados en la avenida Atahualpa. Ahí, de a poco, empezaron a llegar los ibarreños para no disfrutar del partido y alentar al equipo ecuatoriano Independe del Valle, que se enfrentaba a Colón de Argentina.
A las 15:30, cuando inició el encuentro deportivo, los bares que habían colocado pantallas gigantes, lucían llenos y la gente empezó a comprar diferentes productos. Roberto Dávila, por ejemplo, era un ciudadano que llegó al lugar con sus amigos para distraerse un poco. “Es bueno que hayan puesto el fútbol aquí porque en la casa no tengo cable. Entonces, vine con mis amigos a ver el encuentro y a disfrutar”, dijo.
Mientras que Daniel Mercado, que trabajaba en un local comercial del sector, dijo que estos eventos son indispensables porque ayudan a recuperar la economía. “Como perdimos dinero por los días del feriado, por lo menos hoy recuperamos algo la plata. Por eso, pusimos combos y ofertas para que la gente haga el gasto”.
Momentos inolvidables
Las personas que estuvieron disfrutando del encuentro, vivieron puntos de clímax a lo largo del partido, que se manifestó en la euforia de sus gritos y cánticos. El primero fue cuando inició el cotejo, donde muchas personas gritaron “viva el Ecuador” y “vamos Independiente del Valle”. El segundo momento fue cuando, en el minuto 25, cuando después de un tiro libre, Luis Fernando León anotó el primer gol de cabeza.
Con el tiempo transcurrido y los nervios que aumentaban, llegó el minuto 42. Después de arrancar por la banda izquierda, Jhon Jairo Sánchez anotó la segunda anotación y desató los aplausos y abrazos de la gente. Carlos Narváez, por ejemplo, se abrazó dentro del local comercial con sus amigos y se le soltaron un par de lágrimas. “Este momento es único. Ya solo faltan 45 minutos y Ecuador tendrá su campeón internacional”, dijo.
Iniciado el segundo tiempo, las personas siguieron disfrutan intensamente el partido. Pero, el sufrimiento apareció cerca del final, cuando Colón descontó el marcador con un gol. Con 7 minutos de adición, los clientes que estaban en los locales de la avenida Atahualpa sufrían y reclamaban que ya culminé el encuentro. No querían que le igualen a Independiente. Sin embargo, en el último minuto, el equipo de Sangolquí hizo un contragolpe letal y desató la algarabía por el gol del campeonato. La gente se abrazó, saltó y lloró porque por segunda vez, un equipo ecuatoriano brilla en todo el continente. (PTEG)
Dato
Los locales adecuaron pantallas gigantes a sus negocios para que la gente pueda disfrutar del encuentro deportivo.
Grupos de amigos y familiares coparon los bares del sector, donde pudieron disfrutar del partido final en vivo.
Redacción IBARRA
Desde las 15:00 del sábado, varios ciudadanos dejaron sus actividades de lado para dedicarse a ver la final de la Copa Sudamericana. El sitio escogido para la ocasión fueron los bares ubicados en la avenida Atahualpa. Ahí, de a poco, empezaron a llegar los ibarreños para no disfrutar del partido y alentar al equipo ecuatoriano Independe del Valle, que se enfrentaba a Colón de Argentina.
A las 15:30, cuando inició el encuentro deportivo, los bares que habían colocado pantallas gigantes, lucían llenos y la gente empezó a comprar diferentes productos. Roberto Dávila, por ejemplo, era un ciudadano que llegó al lugar con sus amigos para distraerse un poco. “Es bueno que hayan puesto el fútbol aquí porque en la casa no tengo cable. Entonces, vine con mis amigos a ver el encuentro y a disfrutar”, dijo.
Mientras que Daniel Mercado, que trabajaba en un local comercial del sector, dijo que estos eventos son indispensables porque ayudan a recuperar la economía. “Como perdimos dinero por los días del feriado, por lo menos hoy recuperamos algo la plata. Por eso, pusimos combos y ofertas para que la gente haga el gasto”.
Momentos inolvidables
Las personas que estuvieron disfrutando del encuentro, vivieron puntos de clímax a lo largo del partido, que se manifestó en la euforia de sus gritos y cánticos. El primero fue cuando inició el cotejo, donde muchas personas gritaron “viva el Ecuador” y “vamos Independiente del Valle”. El segundo momento fue cuando, en el minuto 25, cuando después de un tiro libre, Luis Fernando León anotó el primer gol de cabeza.
Con el tiempo transcurrido y los nervios que aumentaban, llegó el minuto 42. Después de arrancar por la banda izquierda, Jhon Jairo Sánchez anotó la segunda anotación y desató los aplausos y abrazos de la gente. Carlos Narváez, por ejemplo, se abrazó dentro del local comercial con sus amigos y se le soltaron un par de lágrimas. “Este momento es único. Ya solo faltan 45 minutos y Ecuador tendrá su campeón internacional”, dijo.
Iniciado el segundo tiempo, las personas siguieron disfrutan intensamente el partido. Pero, el sufrimiento apareció cerca del final, cuando Colón descontó el marcador con un gol. Con 7 minutos de adición, los clientes que estaban en los locales de la avenida Atahualpa sufrían y reclamaban que ya culminé el encuentro. No querían que le igualen a Independiente. Sin embargo, en el último minuto, el equipo de Sangolquí hizo un contragolpe letal y desató la algarabía por el gol del campeonato. La gente se abrazó, saltó y lloró porque por segunda vez, un equipo ecuatoriano brilla en todo el continente. (PTEG)
Dato
Los locales adecuaron pantallas gigantes a sus negocios para que la gente pueda disfrutar del encuentro deportivo.