Un sentenciado y otro liberado en caso de homicidio

Detención. Franklin fue el primero en ser aprehendido junto a su madre. Él enfrentaba cargos por el crimen y ella por haber limpiado y escondido el arma homicida.
Detención. Franklin fue el primero en ser aprehendido junto a su madre. Él enfrentaba cargos por el crimen y ella por haber limpiado y escondido el arma homicida.

IBARRA

En total, tres años y cuatro meses es la pena privativa de libertad que Álvaro David H.R. deberá purgar en la penitenciaría de Ibarra. Mientras que Franklin Marcelo, su hermano, recuperó su libertad luego de casi siete meses de haber permanecido interno junto a su allegado, al ser acusados del homicidio del joven taxista Stalin López, hecho de sangre registrado el pasado 23 de julio de 2018.

Ayer finalizó el juicio. La familia de la víctima no aceptó la pena impuesta, por lo que clamaba justicia en la parte externa del edificio judicial una vez que la diligencia terminó, asegurando que esperaban que se les otorgue a los implicados la pena máxima, con más años de cárcel.

La audiencia

Testigos fueron despachados desde la anterior actividad judicial hasta ayer, en donde casi todos fueron evacuados. Un pequeño grupo de personas, que también fueron llamadas a esta cita, no fue integrado a la lista de versiones, por cuanto para los jueces al parecer ya tenían claro el suceso.

Cerca de las 14:30 se efectuaron los alegatos de las partes procesales y posteriormente los jueces procedieron a realizar la deliberación del caso. Los minutos se tornaron extensos, hasta que los tres jurisconsultos salieron para dar a conocer la responsabilidad material sobre los acusados, dictando sentencia condenatoria para Álvaro y absolutoria para Franklin.

Antecedentes

El caso conmocionó a varios sectores de la localidad. Se trataba de la muerte inesperada de un muchacho de aproximadamente 24 años, quien fuera encontrado muerto sobre un sillón en la casa de sus amigos.

Una disputa entre Franklin y Álvaro habría generado que el ambiente se tornara violento, al punto en el que uno de ellos fue a la cocina para tomar un cuchillo con el fin de amedrentar al otro. Fue entonces que Stalin intervino con el aparente objetivo de menguar la acalorada discusión, y en medio del forcejeo resultó con una mortal herida a la altura de su pecho, la misma que perforó su corazón, dejándolo sin posibilidades de salvarse, pues la hemorragia lo mató en cuestión de minutos.

El primero en ser privado de su libertad fue Franklin, quien fue hallado junto a su madre en el hospital público de Ibarra, en donde preliminarmente refirieron que habían sido asaltados, pero su coartada no fue convincente por lo que los efectivos de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Extorsión y Secuestro (Dinased) de Imbabura los detuvieron.

En las indagaciones se logró vincular Álvaro, el cual tiempo después se entregó a las autoridades para ser procesado. (MAGC)

Madre también enfrentó cargos

La progenitora de los procesados también fue privada de su libertad, en primera instancia, al ser acusada de manipular la escena del crimen, limpiando el arma homicida (cuchillo) y escondiéndola entre ropa de una de las habitaciones de su vivienda, la misma que luego fue encontrada por los agentes élite de la Dinased de Imbabura.

CIFRA

7 meses han pasado desde la trágica muerte de Stalin López. Sus familiares aún lloran su ausencia.