Proyecto minero Cascabel con incumplimientos

Cascabel. El proyecto minero se ubica entre La Carolina y Lita, entre los límites entre Imbabura y Carchi.
Cascabel. El proyecto minero se ubica entre La Carolina y Lita, entre los límites entre Imbabura y Carchi.

Imbabura

Ayer en la tarde se llevó a cabo la lectura del informe preliminar del Examen Especial al proyecto minero Cascabel, ubicado en las provincias de Imbabura y Carchi. El periodo analizado comprende desde el 1 de enero de 2012 a 31 de diciembre de 2017.

Este proyecto tiene un área concesionada de 5.000 hectáreas, y proyecta la explotación de cobre y oro. Según Contraloría, entre 2013 y 2014, la empresa canadiense a cargo de la concesión inició la fase de exploración avanzada sin cumplir con los requisitos de ley establecidos en el artículo 57 de la ley de minería.

Estos requisitos incluyen evidencias de la realización de una consulta previa libre e informada con las comunidades de la zona; certificado de no afectación de recursos hídricos de la Secretaría del Agua ( Senagua); declaración notarizada de la renuncia voluntaria a un área de la concesión minera; entre otras.

Además, según el organismo de control, el concesionario minero, y las autoridades de Energía, Minería y Ambiente, no controlaron el cumplimiento de lo establecido en el plan ambiental, sobre todo tomando en cuenta que la fase de exploración avanzada involucra la perforación de pozos.

Así, las actividades en el área iniciaron 835 días antes de obtener las autorizaciones respectivas de cambio de fase, y 219 días antes de obtener el certificado de Senagua.

Otro incumplimiento es que no se respetó la normativa de uso y aprovechamiento de agua para fines humanos e industriales, la cual estipula que a costo del concesionario se deben instalar medidores de caudal de afluentes. Con esto se busca controlar cualquier tipo de contaminación de fuentes de agua cercanas, como quebradas.

Sin embargo, según Contraloría se verificó contaminación con aguas negras y grises en quebradas cercanas como la de Alpala.

Incluso, se llega a registrar niveles de residuos 11 veces superiores a los límites permitidos, sin que ninguna autoridad o ministerio haya establecido las acciones de control necesarias.

Con respecto a los pozos de perforación, el organismo de control estableció que se aumentó el área de desbroce vegetal consignada en el plan de manejo ambiental, de 25 m2 a 400 m2, sin autorización y sin el cumplimiento del inventario botánico y de fauna, con lo que no se puede determinar la cantidad de especies arbóreas taladas, las especies endémicas amenazadas, y los animales desplazados.

Finalmente, se detectó fluido residual contaminado durante la perforación de los pozos, sin que se haya puesto en marcha un proceso de tratamiento y re circulación de agua.

Recorrieron Cascabel

Un equipo periodístico de este medio de comunicación recorrió junto a autoridades nacionales, hace dos semanas, el proyecto. La empresa minera australiana SolGold, que llegó a la provincia en el 2012, se encuentra actualmente en fase de exploración avanzada del proyecto minero Cascabel.

Jason Ward, presidente de la compañía, en su momento calificó al sitio como un gran yacimiento de clase mundial de cobre y oro, ya que el volumen de uno de sus depósitos (Alpala), según las últimas estimaciones, contiene más de 10.9 millones de toneladas de cobre y más de 23 millones de onzas de oro.

El proyecto Cascabel fue adquirido en el 2011 por parte de la canadiense Cornestone, pero en el 2012 la compañía australiana SolGold, basada en Brisbane, adquirió el 85% de Cascabel. Desde entonces, SolGold, a través de su subsidiaria ecuatoriana Exploraciones Novoming S.A. (ENSA), maneja lo que podría llegar a ser una de las minas productoras de cobre y oro más importantes de América Latina, a nivel país inclusive más grande que el proyecto Fruta del Norte, que se localiza en Zamora Chinchipe.

El martes 13 de diciembre, los directivos de SolGold conjuntamente con el viceministro de Energía y Recursos No Renovables, Fernando Benalcázar, realizaron un recorrido por el proyecto minero.

En la visita realizada a los campos Rocafuerte y Alpala, informaron que al momento se tiene 12 máquinas de perforación (taladros traídos de Australia) en Cascabel, dedicadas a realizar pozos para delimitar cuerpo mineralizado. En el sitio se han perforado alrededor de 90 pozos, que suman 170.000 metros de profundidad.

Además, mencionaron que SolGold cuenta con sistemas de tratamiento y recirculación de agua en sus procesos industriales y en campamentos, como también realizan procesos de rehabilitación de áreas en las que interviene la empresa, con especies nativas que no alteran el ecosistema natural, lo que se contradice con el informe de Contraloría leído ayer en Quito.

Diego Arcos, gerente de seguridad, salud y ambiente de SolGold, dijo que el 84,5% de las áreas intervenidas ya han sido rehabilitadas (plataformas, fosas de sedimento), mientras que el 15,5% se mantienen en operación. En lo que refiere al agua, especificó que el 100% de las aguas residuales industriales son tratadas.

En el proyecto se ha invertido hasta el momento 95 millones de dólares, de los cuales 51 millones se canalizaron este año. Además estaba previsto para el 2019 y 2020 hacer una inversión de 90 millones, pero todo quedaría pendiente hasta que se aclaren las observaciones generadas desde Contraloría. (JS / FCDL)

DATO

Los involucrados tienen cinco días hábiles para presentar sus pruebas de descargo.