Una mujer recibió un disparo en su humanidad luego de ser sometida y golpeada por un grupo de antisociales.
Redacciòn ANTONIO ANTE
M.J.M.V., fue hallada sin vida en medio de un charco de sangre al interior de su finca situada en el sector de San José de Monjas en Imbaya, límite con el cantón Urcuquí. Preliminarmente se conoció que el móvil del crimen es un asalto y robo.
Los restos de la víctima fueron ingresados en la morgue del Hospital San Vicente de Paúl (HSVP) de Ibarra, para ser valorados.
La muerte
En el informe policial consta que a través del ECU – 911, los uniformados de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Extorsión y Secuestro (Dinased) de Imbabura, fueron convocados para constatar el hecho verificando que se trataba de una ciudadana que se encontraba en el piso de su habitación, semidesnuda y con una herida de bala en la cabeza.
A.R.E.C., y E.E.F.M., trabajadores de la hacienda, explicaron a los policías que alrededor de la 01:30 de ayer, un grupo aproximado de siete personas ingresaron intempestivamente a la propiedad y los maniataron, para luego llevarlos a la habitación de la dueña del inmueble a quien también la amarraron de pies y manos. En la versión consta que los delincuentes torturaron a la mujer agrediéndola físicamente, mientras en reiteradas ocasiones le preguntaban sobre la ubicación de un dinero y oro, que aparentemente estaba guardado en su propiedad.
Los antisociales habrían buscado por toda la casa intentando localizar el botín que supuestamente pensaban hallar, pero al no encontrar nada, le propinaron un disparo a quemarropa en la cabeza a M.J.M.V., dejándola sin vida.
Misterio ronda el hecho
La escena del crimen era trágica. Alrededor del cadáver y la sangre esparcida en el piso, se podía observar los cajones sacados de su base, fundas y ropa regada así como algunos adornos navideños que yacían en el suelo. Extraoficialmente se conoció que esta no sería la primera vez que la propietaria del lugar era visitada por personas sospechosas, pues hace poco más de tres meses habrían intentado robarle sus pertenencias.
Entre la información preliminar se conoció que al parecer la finca era un centro de acopio de material minero, pero sobre el tema no existe evidencia, sin embargo se presume que los antisociales que cometieron el delito, probablemente fueron en busca de dicho cargamento y al no encontrarlo cometieron el macabro crimen. No obstante, el dato aún no ha sido confirmado, por lo que los uniformados realizarán las investigaciones del caso para determinar las reales causas del brutal impasse.