Redacción IBARRA
Un nuevo incidente se registró en el Control Policial de Mascarilla entre ciudadanos afrodescendientes, presuntamente habitantes del Valle del Chota y servidores policiales que se encontraban laborando en el lugar en un operativo de rutina y control.
Según reza en el informe policial, levantado al respecto de este hecho registrado durante este fin de semana, un oficial hizo parar al mencionado carro con el fin de solicitarle documentos, pero el conductor identificado como Ricardo B., únicamente entregó su licencia de conducir, a lo que el uniformado le reiteró que necesitaba la matricula del automotor.
La agresión
Ante el pedido del uniformado, el acompañante de Ricardo, quien responde a la identidad de Diomedes Y., habría mencionado una lista de epítetos soeces en contra del efectivo, quien intentando verbalizar con el enardecido hombre le solicitó se calmara y le entregue el documento que certifique la legalidad del automotor que se encontraba sin las respectivas placas de identificación, a lo que el hombre enfurecido habría decidido bajar del carro para continuar con las agresiones verbales y hasta amenazas en contra del servidor.
Otro oficial que se encontraba en el sitio se acercó para conocer el inconveniente, haciendo un nuevo y cordial llamado a la calma del ciudadano de etnia afrodescendiente, quien también respondió de manera soez al otro efectivo. “Ya van a ver lo que les va a pasar voy a llamar a más gente del Valle del Chota, no tengo la matrícula y cuál es el problema, ya deberían largarse de aquí ustedes no dejan trabajar, sapos”, habían sido parte de las amenazas que el sospechoso habría emitido en contra de los policías.
Huyeron
Tras los insultos, el hombre abordó nuevamente la camioneta intentando arrollar a los uniformados, para luego intentar también destruir con el mismo vehículo la caseta policial que yace en el parterre del lugar. Los servidores se pusieron a buen recaudo para evitar ser embestidos, cuando una vez más el individuo habría amenazado a los funcionarios asegurándoles que vendrán más personas afrodescendientes para agredirles; “si no nos dejan trabajar en paz”, consta en el informe.
Posteriormente los sospechosos abandonaron el sitio en precipitada carrera con dirección al Valle del Chota. El hecho fue elevado a conocimiento de las autoridades policiales para que las medidas de seguridad sean tomadas al respecto de esta nueva amenaza de la que el personal que labora en la zona ha sido víctima.
Como estos, existen otros reportes en los que se detallan más agresiones, amenazas de muerte, entre otras situaciones que podrían poner en riesgo la vida de los uniformados que laboran en el Control Policial en los diferentes servicios asignados. (MAGC)
Controles se mantienen
Pese a no contar con las instalaciones adecuadas, los uniformados policiales del grupo élite del Centro Regional de Adiestramiento Canino (CRAC), efectivos de la Unidad de Control Fronterizo (UCOF), Tránsito, y Policía Judicial continúan laborando en cualquier condición climática durante turnos que completan las 24 horas diarias todos los días de la semana.