La organización internacional cuestiona la sostenibilidad de los fondos. Más voces piden que se revise el modelo.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) expresó su preocupación sobre la sostenibilidad de los fondos del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) en un estudio que fue solicitado y difundido por los representantes de empresarios, trabajadores y jubilados. El informe analiza el impacto que tuvo la decisión del Consejo Directivo de bajar el aporte de pensiones para pasarlo a Salud desde noviembre de 2015 y el impacto que tuvo esto en el fondo de pensiones.
Según la OIT, la situación del Seguro de Salud se deteriora progresivamente, a pesar de haber incrementado el aporte y para este año ya se necesita tomar alrededor de 170 millones de dólares de las reservas del Fondo para solventar los gastos.
También advierte de un déficit financiero inmediato en el Fondo de Invalidez, Vejez y Muerte por 1.400 millones en 2016. Y que, bajo el escenario proyectado, para 2020 no existirán recursos en el fondo de pensiones.
Indica, además, que el Seguro de Riesgos del trabajo también sufre consecuencias por el ajuste de las tasas de aportación. “En 2016 ya se presenta un déficit financiero de 87 millones”, cita el informe.
En 2017, de acuerdo con la OIT, los ingresos previstos para pensiones (1.689 millones) equivalen a menos de la mitad de los gastos por concepto de entrega de prestaciones, estimado en 3.632 millones.
Es decir, que para solventar los gastos de este Seguro será necesario desinvertir de la reserva del fondo 1.752 millones. Se suman los intereses de las inversiones, que igual se verán afectados porque la cartera irá disminuyendo. En este punto, resalta el informe, 2018 se tiene previsto una desinversión de 2.000 millones para solventar este rubro.
‘Realmente preocupante’
En el caso del Seguro de Salud, la OIT considera que la situación es “realmente preocupante” y asegura que para este año será necesario, a pesar del incremento en la tasa de cotización que benefició temporalmente a este Seguro, tomar también gran parte de su reserva. “Se prevé que la situación empeore los siguientes años, ya que la tasa de aportación del Seguro de Salud, según el plan previsto, pasará de 9% en 2017 a 5,16% en el año 2021”, cita el documento.
Según el presidente de la Cámara de Comercio de Quito, Patricio Alarcón, la afectación para el sector empleador radica en que si esto no se soluciona habría que subir la edad de jubilación y los aportes del sector privado, gremio que en estos momentos no cuenta con la suficiente capacidad de respuesta, debido a la carga tributaria.
“La sostenibilidad del IESS está en riesgo. Según el informe de la OIT, el IESS podrá subsistir solo por cinco años más si se sigue manejando así. Hacemos un llamado para que se forme una comisión tripartita conformada por trabajadores, empleadores y Gobierno, que discuta el modelo”, dijo.
Por su parte, José Villavicencio, representante del Frente Unitario de Trabajadores, indicó que si no se toman medidas inmediatas el IESS “podría desaparecer, afectando a millones de ecuatorianos”.
Este Diario buscó la versión de un vocero del IESS, pero, al estar cumpliendo agenda en Cuenca, desde el departamento de Relaciones Públicas indicaron que se dará atención a la información solicitada en los próximos días, a través de una entrevista con el presidente, Richard Espinosa. (LGP)
Cuestionamientos al informe actuarial
El informe de la OIT fue elaborado con base en la información disponible en los estudios realizados por la dirección actuarial del IESS, que toma como escenario el periodo 2014-2053, así como el estudio realizado por la empresa Volrisk en 2015.
Pero el informe de la OIT cuestiona el estudio de Volrisk, pues considera que no estuvo enfocado en la mejora de los seguros a largo plazo.
Las expectativas de gasto consideradas por el estudio de Volrisk para el Seguro de Salud, no consideraban la construcción de nuevos hospitales del IESS en Quito, Guayaquil, Machala y Quevedo, que incrementará el gasto de este seguro, explica.