Transporte urbano de Ibarra se paralizó por el incremento del precio del diésel

Protestas. En el centro de Ibarra se reunieron buses de las dos cooperativas urbanas.
Protestas. En el centro de Ibarra se reunieron buses de las dos cooperativas urbanas.

Dos cooperativas brindan el servicio dentro de la capital provincial de Imbabura, las cuales paralizaron sus rutas.

Redacción IMBABURA

Sin previo aviso, ni anuncios de paralizaciones, las cooperativas de buses urbanos de Ibarra decidieron protestar. El motivo: el incremento de los combustibles en el país, principalmente del diésel, que es el que más les afecta.

A las 11:30 arribaron hasta los exteriores del Municipio de Ibarra, en pleno centro de la urbe, donde el sonido de sus bocinas se tomó el ambiente citadino.

Según uno de los transportistas que participó de la movilización pacífica, que prefirió no dar su nombre, el único objetivo es protestar por el alza de combustibles, que por alrededor de un año, a mes seguido, ha subido su precio.

En mayo de 2020 el precio del diésel era de un dólar por galón, pero el 12 de mayo de 2021 el nuevo precio es de $1,48. Es decir, en 11 meses el incremento es de 48 centavos, casi del 50% de su valor el año pasado.

Reunidos con autoridades

Mientras los buses de las cooperativas 28 de Septiembre y San Miguel de Ibarra bloqueaban la calle Bolívar, principal arteria el centro urbano, en el interior de la municipalidad las autoridades locales y representantes de los transportistas mantenían una reunión.

Otro de los transportistas, que afirmó no ser el vocero oficial y que por eso no podía identificarse, explicó que pedirán, al igual que ocurrió con los buses interprovinciales, incrementar el costo de los pasajes, para poder cubrir sus operaciones.

“Estamos al borde de la quiebra. Nos redujeron el aforo de pasajeros y por la pandemia la gente tampoco viaja como antes en los buses. Aparte nos suben mensualmente el precio del diésel”, explicó.

La presencia de las unidades en el centro de la ciudad no duró más de 15 minutos. Tras su presencia, a manera de protesta simbólica, se marcharon a continuar con sus labores, pero afirmando que de no ser escuchados tomarán otras medidas.

Opiniones de los usuarios

En medio de las protestas de los transportistas, las voces de los usuarios de los buses urbanos se mostraron a favor y en contra de sus quejas.

“Antes de reclamar, que primero aprendan a dar un mejor servicio. Fueron los primeros en subir el pasaje a 30 centavos y no han mejorado en nada”, dijo Alberto Méndez, mientras aguardaba en una de las paradas.

Paúl Alarcón, por su parte, expuso su queja en redes sociales porque en Ibarra el costo del pasaje es superior al de Quito, donde se cobra 25 centavos, siendo una ciudad donde los recorridos son más amplios.

“Solo la gente que es mal enseñada a todo regalado está en contra de la paralización de transporte. Mantenga un bus a ver si puede. Y con el incremento del combustible es lo mejor que pueden hacer los transportistas”, opinó Steven Villarreal.

Paralizar el transporte público es un delito

El artículo 346 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) señala que “la persona que impida, entorpezca o paralice la normal prestación de un servicio público o se resista violentamente al restablecimiento del mismo será sancionada con pena privativa de libertad de uno a tres años”.

Además, el artículo 326 de la Constitución ecuatoriana, establece la prohibición de la paralización del transporte público. Con base en esto, unas 300 personas fueron detenidas por actos vandálicos y paralización del servicio de transporte tras las protestas de octubre del 2019 en todo el país.

Policía Nacional, Fuerzas Armadas, Cuerpo de Bomberos, Agentes de Control Municipal  y Agentes de Tránsito ejecutan los operativos en Antonio Ante.