148 nuevas cámaras y alarmas barriales contra la inseguridad en Ibarra

Instalación. La última semana de 2022 comenzaron a colocar las nuevas cámaras.
Instalación. La última semana de 2022 comenzaron a colocar las nuevas cámaras.

El ECU-911 atiende alrededor de 150 llamadas diarias referentes a seguridad ciudadana en la ciudad.

Redacción IBARRA

Instalar nuevas cámaras de vigilancia en zonas urbanas, alarmas comunitarias en barrios y operativos con agentes municipales, son parte de las acciones emprendidas por el Municipio de Ibarra para combatir la inseguridad en las calles.

Según las estadísticas del ECU-911, el promedio de emergencias que se coordinan en Ibarra, capital provincial de Imbabura, es de 7.000 a 7.500 mensuales, de las cuales alrededor del 65% corresponde a alertas por seguridad ciudadana.

Juan Manuel Córdova, director municipal de Seguridad Ciudadana, dijo que en septiembre de 2022, el ECU-911 coordinó 7.330 emergencias en el cantón, para lo cual se ha movilizado recursos de Policía Nacional, del Ministerio de Salud Pública, del Cuerpo de Bomberos y de Agentes Civiles de Tránsito.

De esas 7.330 llamadas, más de 4.500 se atendieron para pedir patrullajes policiales en sectores específicos, resguardo a personas que trasladan dinero, registro de personas o carros con actitud sospechosa, hurtos, retiro de libadores, entre otros casos referentes a lo que el ECU-911 cataloga como seguridad ciudadana.

Nuevas cámaras y alarmas

Córdova manifestó que como Municipio de Ibarra les preocupa la seguridad de la ciudadanía, por lo que se ha decidido implementar más cámaras de videovigilancia y alarmas comunitarias en el cantón.

En cuanto a las cámaras, dijo que ya se han instalado 103 en sectores estratégicos de la ciudad, a las que se sumarán otras 45, que estarán conectadas directamente al ECU-911, dando un total de 148 puntos de seguridad en sitios públicos de Ibarra.

Según la Dirección de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad, otra de las acciones para contrarrestar la delincuencia es la ubicación de alarmas comunitarias en barrios.

De la mano de la colocación de las alarmas, según dirigentes barriales, se organizan simulacros de robos para capacitar a los vecinos sobre cómo usar los dispositivos de alerta y actuar frente a la delincuencia.

Angelina Landázuri, presidenta del barrio Azaya Centro, expuso que este tipo de simulacros se realizan cada mes, “para medir la efectividad y el comportamiento de los moradores cuando se activan estos sistemas de seguridad”.

“La comunidad está organizada, a través de los dirigentes y estamos con el objetivo de bajar el índice de inseguridad del sector”, agregó Jorge Camués, analista de Seguridad del Municipio.

En la zona donde vive Landázuri se ubicaron 11 alarmas comunitarias. Desde la Dirección de Seguridad se indicó que se seguirán haciendo este tipo de simulacros en todos los barrios del cantón. (FV)

Simulacros. En los barrios se instalan alarmas comunitarias y se ensaya cómo actuar frente a la delincuencia.
Simulacros. En los barrios se instalan alarmas comunitarias y se ensaya cómo actuar frente a la delincuencia.

Operativos son insuficientes

De la mano de la Policía Nacional, los Agentes de Control Municipal realizan un promedio de 100 operativos mensuales, para garantizar la seguridad en espacios públicos de Ibarra. Sin embargo, la ciudadanía siente que son insuficientes y concuerdan en que se debería aplicar con mayor rigurosidad la ordenanza de seguridad reformada a mediados del presente año por el Concejo Municipal.

Juan Manuel Córdova, director municipal de Seguridad Ciudadana, resaltó que los operativos se ejecutan a diario, con todos los entes de control, para la recuperación de espacios públicos, control a libadores en espacios no autorizados, control de armas y requisas de armas blancas.

Pero ciudadanos como Nicolás Ramírez sostienen que las normativas municipales no se hacen respetar del todo, pues aún se evidencia, por ejemplo, la presencia de personas tomando licor en carros y sitios públicos o usando parques y edificios para dormir.

“La ordenanza nueva dice que se sanciona a todos los que ingieren licor en las calles, así sea en los vehículos, pero afuera de las tiendas se siguen parqueando en los carros a tomar. En los parques siguen durmiendo en carpas. Se dijo que no iban a poder viajar dos personas en una moto, pero yo les veo hasta sin casco”, aseguró.

Como otro ejemplo, Pilar Burbano mencionó que la ordenanza reformada establece que no se puede realizar ninguna actividad circense, limpieza de parabrisas, ventas ambulantes, cuidado de vehículos, servicio de estacionamiento, en ningún espacio público sin autorización, como semáforos o parques, pero “eso sigue siendo el pan de cada día en calles y avenidas”.

De 7.000 llamadas mensuales al ECU-911 que se dan en Ibarra, alrededor de 4.500 son por alertas de seguridad ciudadana.