La vida de ciertos negocios depende de la vuelta a clases

Oferta. Poca presencia de clientes en las papelerías de Ibarra, en temporada de regreso a clases.
Oferta. Poca presencia de clientes en las papelerías de Ibarra, en temporada de regreso a clases.

Papelerías y sitios dedicados a la venta de uniformes escolares no logran reactivarse desde hace más de un año y medio.

Redacción IBARRA

La temporada de ingreso a clases era una de las más deseadas por las papelerías y locales dedicados a la confección y venta de uniformes escolares. Sin embargo, llevan más de un año y medio con ventas que apenas les alcanza para cubrir arriendos y costos de operación, según concuerdan propietarios de estos negocios.

Atrás quedaron las jornadas donde era necesario extender los horarios y contratar más personal, pues las semanas previas al ingreso de clases las personas se abarrotaban en estos locales para conseguir lo necesario para que los alumnos comiencen el periodo escolar.

Diana Lucero, quien tiene una papelería en el centro de Ibarra, dice que las ventas en promedio se redujeron en un 80%, por lo que entre las opciones para no cerrar y mantener el negocio tuvo que despedir a dos de sus colaboradores.

“Ahora se ha convertido en un negocio familiar, donde atendemos nosotros personalmente, desde la mañana hasta la noche, porque no nos alcanza para pagar sueldos y apenas nos sale para cubrir gastos”, explica.

Para Raúl Cisneros, propietario de un negocio similar en un barrio residencial de la ciudad, desde el 2020 la situación prácticamente se ha vuelto insostenible, pues al ser clases virtuales los útiles escolares dejaron de ser necesarios.

“Amigos que tenían el mismo negocio tuvieron que cerrar. Yo al tener el local en mi propia casa no pago arriendo y eso me ayudó un poco, pero el año anterior estábamos totalmente cerrados, sin nada de ventas, sin clases presenciales, por lo que no hicieron falta las listas de útiles”, comenta.

Uniformes

Otro de los negocios que tienen su economía ligada a la escolaridad es la confección y venta de uniformes escolares, donde tampoco hubo reactivación significativa.

Rosa Montalvo, quien se dedica desde hace 10 años a la elaboración de uniformes para instituciones educativas, expuso que la reducción de ventas, bordea el 90% de ingresos, con una ligera recuperación en agosto de 2021.

“El año pasado las ventas fueron nulas, en cero. Este año, con el regreso de algunos colegios a la presencialidad, hemos podido vender algo, que es mejor que nada. Tenemos la esperanza de que vendrán mejores días, cuando todos ya tengan que ir a clases”, puntualiza.

Para poder sobrevivir a la pandemia, este tipo de negocios tuvieron que adaptarse, como comenta Enrique Burbano, quien tuvo que dejar de lado la fabricación anual de casi 500 uniformes solo para una unidad educativa y dedicarse a confeccionar productos referentes a bioseguridad, como mascarillas o trajes.

“A esto es a lo que nos dedicamos toda la vida y no tenemos otra fuente de ingresos. Tenemos los equipos para confección y nos adaptamos a los pedidos de los clientes en la pandemia, pero cuando vuelvan a las aulas retomaremos los uniformes escolares”, señala.

Gastos para los padres

Desde los padres de familia se menciona que el no comprar uniformes o listas de útiles, en algunos casos, ha sido un alivio para su economía, mientras que otros aseguran que las clases virtuales les implicaron más gastos que la presencialidad.

Blanca Muñoz, quien tiene un hijo en la escuela y a su hija en el colegio, dice que para que puedan acudir a las clases virtuales le tocó comprar una computadora y un celular, más el pago del servicio de internet. “Se gasta en libros, esferos, pero nos ahorramos los cuadernos prácticamente. Igual la tecnología es cara, por lo que nos resulta un gasto parecido y a veces hasta mayor que estar yendo a clases”, expuso.

Otra de las actividades económicas que se ve afectada por el cierre de escuelas es el transporte escolar.

Útiles y uniformes no son obligatorios

El Ministerio de Educación expuso que la no adquisición de los útiles escolares o uniformes no puede ser una barrera de acceso o exclusión de la educación.

Además, recordó que las instituciones educativas particulares y fiscomisionales no podrán incrementar los valores de matrícula y pensión para el año lectivo 2021-2022.

A través de un comunicado, la Cartera de Estado menciona que los materiales del año anterior podrán ser reutilizados en el siguiente ciclo académico, ya que estos insumos permitirán al estudiante aprovechar su proceso de aprendizaje en la oferta educativa que sus padres o apoderados elijan.