El contrabando aumenta con la devaluación del peso colombiano

Trochas. Los contrabandistas atraviesan fincas, montañas y ríos fronterizos para evadir los controles regulares.
Trochas. Los contrabandistas atraviesan fincas, montañas y ríos fronterizos para evadir los controles regulares.

En los caminos vecinales del límite fronterizo se observa un mayor flujo de transporte que intenta evitar los controles.

Redacción CARCHI

El diferencial cambiario entre el peso colombiano y el dólar provocó un aumento en el contrabando en la frontera norte, entre Ecuador y Colombia, en las últimas semanas.

Según los reportes del Ejército ecuatoriano, la devaluación de la moneda del vecino país motiva a que las personas acudan con dólares a comprar diversos tipos de productos como calzado, textiles, fármacos o electrodomésticos. Esos y otros productos ingresan en cantidades grandes y quienes los transportan intentan evadir los caminos oficiales para burlar los trámites aduaneros, usando ‘trochas’ (caminos fronterizos ilegales), que atraviesan ríos, fincas y montaña, donde la presencia de autoridades de control es prácticamente esporádica o nula.

“Tenemos 28 pasos identificados, pero a raíz de la pandemia de COVID-19 se aumentaron seis pasos más, los cuales paulatinamente se han ido cerrando, porque eran los dueños de los terrenos ubicados en la línea de frontera los que habilitaban estos accesos y empezaban a realizar ciertos cobros para pasar por estos lugares el límite político internacional”, explicó Jaime Guerra, comandante del Ejército acantonado en la provincia de Carchi.

Operativos y competencias

Guerra advirtió que una de las preocupaciones de los últimos días es el aumento del contrabando en las ‘trochas’, que ha sido identificado en los diversos operativos desplegados en la frontera.

Sin embargo, puntualizó que las Fuerzas Armadas, en estos operativos, se dedican a cumplir sus tareas de control de armas y explosivos, mientras que los temas de contrabando deben ser abordados por la Aduana.

“Lo que sí nos preocupa es la situación del contrabando, que se está incrementando. Esta situación del cambio de moneda, los valores entre el dólar y el peso, con marcadas diferencias, es lo que ha incrementado el contrabando, pero esa competencia la tienen otras instituciones, mientras las Fuerzas Armadas están para apoyar y cooperar con los organismos que tienen que ver con este negocio de contrabando”, dijo.

Añadió que se realizó un sobrevuelo de reconocimiento en toda la frontera, donde verificaron algunos movimientos que preocupan, como sobre el río Carchi, “por donde pasan camiones que tranquilamente podrían circular por Rumichaca”.

Operativos. En los caminos no regularizados se hacen controles esporádicos.
Operativos. En los caminos no regularizados se hacen controles esporádicos.

Piden más controles

Moradores de sectores fronterizos, como Urbina, también manifiestan observar cierto incremento de la circulación de carros pesados por los caminos que conectan a su parroquia con la frontera.

A pesar de que reconocen que esta situación es parte de su diario vivir, concuerdan con que la devaluación del peso colombiano frente al dólar aumentó el flujo de contrabando.

“Si no están militares o policías todo el día en las ‘trochas’, con destacamentos, nunca se acabará el contrabando, porque los operativos son de vez en cuando, entonces cuando se van siguen pasando camiones, taxis, motos…”, expuso uno de los moradores de Urbina, quien pidió que su nombre se mantenga en reserva.

En su momento, el alcalde de Tulcán, Cristian Benavides, advirtió que la falta de controles en las ‘trochas’ se debe a que no se cuenta con el personal policial o militar necesario para ejecutarlos, pues el contingente de Policía asignado para la ciudad también debe hacerse cargo del control del tránsito vehicular, ya que la capital carchense no cuenta con agentes civiles.

Desde el Ejército también han detallado que el control total se convierte en una tarea complicada por la falta de vías, medios y personal, lo que prácticamente les obliga a delimitar su control esporádicamente y solo en ciertos puntos.

Más militares en Carchi

La presencia de uniformados aumentó desde las últimas semanas en sectores como Chical, Maldonado y Tufiño, poblados ubicados a unos 100 kilómetros de la ciudad de Tulcán, capital de Carchi, ante la presencia de grupos armados irregulares de Colombia.

Además, centrales de energía eléctrica, gasolineras y estaciones de agua, tienen especial vigilancia militar desde los últimos días, para precautelar su seguridad ante cualquier amenaza terrorista o narcodelictiva.