El puente que pasa por el río Ambi permanece inhabilitado, al igual que el del río Blanco, los cuales unen a cuatro regiones de Imbabura.
IMBABURA.- Son $13.559 los que invierte la Prefectura de Imbabura para una rehabilitación emergente del puente sobre el río Ambi, en la vía antigua entre Cotacachi y Atuntaqui, así como en otro ubicado sobre el río Blanco, que conecta a los regiones de Quiroga y Otavalo, considerado de características patrimoniales.
“Las dos infraestructuras fueron afectadas por los torrenciales aguaceros, registrados el mes pasado en la provincia. La Prefectura puso en práctica una acción inmediata para rehabilitar las infraestructuras de los viaductos que han sido dañados en ciertas partes, por la fuerza de la naturaleza. Adicionalmente, se elabora una propuesta para ejecutar una intervención completa”, informaron desde el organismos provincial.
Según Pablo Jurado, prefecto de Imbabura, se han acelerado los procesos para ejecutar estas obras, considerando que los pobladores de estas zonas necesitan contar con estos pasos para movilizarse directamente, estimando tener una solución temporal al menos hasta diciembre de 2022.
“Por fortuna, los daños no afectaron la estructura de los viaductos y, por lo pronto, realizamos la reparación y reforzamiento de las partes colapsadas, con el propósito de habilitar cuanto antes el tránsito, que se estima será en un plazo no mayor a un mes”, dijo Jurado.
En el río Ambi
Por su parte, Luis Cazares, subdirector de Infraestructura Física del organismo provincial, explicó que en el puente del río Ambi la tarea consiste en construir un muro de hormigón armado empotrado con anclajes en la base.
“Paralelamente se repone el muro de piedra, mediante un relleno que se hace con suelo consolidado utilizando cemento. La técnica permitirá, en definitiva, arreglar completamente el muro que sufrió daños y la capa de rodadura”, explicó.
En segunda instancia, se traza una propuesta para trabajar en la limpieza y reforzamiento estructural del puente, del drenaje y capa de rodadura, esperando además la colaboración de los gobiernos municipales de Antonio Ante y Cotacachi, que tienen competencia en el área de desagües y descargas de las quebradas y uso del suelo para el ordenamiento de la explotación de las minas que existen en los alrededores.
“Como parte de la labor, el equipo caminero se encargó, en anteriores días, de limpiar los cauces de agua que provienen de la quebrada El Salado, situada en la parte alta del cerro Imbabura, identificando que se trata de la principal causa de las inundaciones que se producen en temporada de lluvia, lo cual provoca amenazas dirigidas a destruir el puente y la carretera”, señalaron desde la Prefectura.