El cadáver presentaba heridas de bala en el tórax, cabeza y la mano derecha.
Lo que sería un mes de trabajo con ingresos económicos, se convirtió en días de angustias para la familia de Manuel Quezada, quien fue hallado muerto y en estado de descomposición en el kilómetro 7 de la vía Quinindé- Santo Domingo.
La víctima de 53 años, residía en el Puyo, provincia de Pastaza, y fue contratado por José R., para que realice con su tractor el desbanque de unos terrenos en un sector de la parroquia Chumundé, cantón Rioverde, zona norte de la provincia de Esmeraldas, para después sacar trozos de madera.
El inicio de su muerte empezó el 17 de septiembre cuando se trasladó con su maquinaria a cumplir con el trabajo encomendado. Los días transcurrían con aparente normalidad hasta que el lunes de la semana anterior perdió contacto telefónico con su esposa. En el último diálogo que tuvieron le comentó que la persona que lo contrató le depositaría 1.300 dólares, pero el dinero nunca apareció en la cuenta de la ahora viuda y su marido desapareció.
¿Por el dinero?
Los días de silencio de Manuel Quezada alertó a sus parientes de que algo le había pasado, y su yerno viajó en su búsqueda. Al llegar al lugar donde debía estar su suegro trabajando, se encontró con la maquinaria que la operaba otra persona. Ahí José R., le indicó que Quezada había viajado con17.500 dólares que le había entregado como parte de pago por la compra del tractor; y el saldo restante que eran 12.500 dólares habían acordado cancelarlo en tres meses, asegurando que la maquinaria la había vendido en 30.000 dólares, pero sin documentos de por medio.
El cadáver de Manuel Quezada será sepultado hoy en el Puyo. Ayer fue retirado del centro forense de Esmeraldas. Los dolientes ya presentaron la denuncia en la Fiscalía para que se investigue en crimen y determinar al o los responsables. Hasta ayer el móvil del asesinato era un misterio que tendrá que ser resulto por los entes competentes. (MBC)