Atacames, listo para recibir turistas

PANORÁMICA. Subir los 300 escalones del sendero de amor que lleva al ‘Peñón del suicida’, es una de las nuevas alternativas turísticas de Atacames.
PANORÁMICA. Subir los 300 escalones del sendero de amor que lleva al ‘Peñón del suicida’, es una de las nuevas alternativas turísticas de Atacames.

Hoteleros están comprometidos a cumplir y hacer respetar las normas de bioseguridad. Desde mañana se ‘abren’ las playas.

Todo empezó el 11 junio. Ese día, Atacames el tercer cantón con la mayor plaza hotelera del Ecuador (25.000 camas) pasó de rojo a amarillo, desde ahí Municipio y hoteleros armaron estrategias para lo que ocurrirá mañana: oficializar el acceso a playas, restaurantes y hoteles.

El burgomaestre Freddy Saldarriaga no logra ocultar su felicidad al saber que, nuevamente volverán a tener turistas que ayuden a dinamizar la economía del 90% de la población que depende directamente de esa actividad que agrupa a también a tricicleros, guías de rutas y de deportes extremos.

A las vigentes alternativas turísticas como degustar mariscos en el ocaso y frente al mar, pasear en bote junto al manglar, desafiar las alturas en parapentes impulsados por lanchas o ‘surfear’ sobre boyas inflables, se suma el sendero del amor recién inaugurado. El nombre no es llega al azar; las historias de amor que ahí nacieron han hecho del cerro de 80 metros un lugar romántico y aventurero.

Antes de ascender los 300 escalones del sendero que lleva al mirador ‘Peñón del suicida’, está una parada obligatoria; el acceso a lo que parece ser una cueva sobre la roca marina donde se ha revivido el amor marital, cuentan los lugareños.

Cantidad limitada

Tras disfrutar de ese espacio llega el ascenso de la escalinata de bambú y arena adornada de plantas y el particular verdor de los árboles frente al océano. Esa caminata que se puede hacer solo, en pareja o con familia, es todo un desafío cardiovascular.

Para llegar al ‘Peñón del suicida’ se debe ingresar por el sector de ‘La Perla’, ubicado entre la ciudad de Atacames y la parroquia de Súa.La estrategia es ir avanzando lentamente y disfrutando de la brisa marina, los silencios de la naturaleza, de la calidez familiar y del lienzo turquesa que forma el mar que baña al sueño cantón con la playa más cercana desde Quito, en relación a otras del país.

En Atacames no se muestran indiferentes al riesgo de contagio de persona a persona, tras volver a recibir a visitantes luego de tres meses con hoteles vacíos y playas (Súa, Tonsupa, Same…) sin gente. Para evitar que el número de infectados Covid los regrese al rojo, cada hotelero no deberá superar el 30% de su aforo, exigir mascarillas, señalética, termómetros infrarrojo para la temperatura corporal, poner a disposición del turista puntos de desinfección y evitar actividades que generen aglomeraciones.

Ordenanza reguladora

Tricicleros y dueños de restaurantes también lo saben, en caso de omisión, lo explica el Burgomaestre, se aplicará la Ordenanza que regula la actividad.

“La meta es pasar al verde”, lo dice esperanzado Freddy Saldarriaga, quien ayer, antes de subir al ‘Peñón del suicida’, en los exteriores del Municipio entregó simbólicamente a la ciudad una ambulancia restaurada, dos camionetas y un recolector de basura para garantizar la correcta atención al turista, el que desde mañana podrá ingresar a playas, restaurantes y hoteles de Atacames ubicado al sur de Esmeraldas. (MGQ)

BELLEZA. Desde uno de los lugares más altos del cantón Atacames se logra observar el mar y parte del balneario de Súa.
BELLEZA. Desde uno de los lugares más altos del cantón Atacames se logra observar el mar y parte del balneario de Súa.

¿Cómo llegar con cantones en rojo?

La provincia de Esmeraldas está conformada por siete cantones: Quinindé, San Lorenzo, Eloy Alfaro, Rioverde, Muisne, Atacames y Esmeraldas. Del grupo, Atacames, Rioverde y San Lorenzo están en semáforo amarillo.

De acuerdo con lo anunciado por los Comités de Operaciones de Emergencias (COE), de Esmeraldas y Quinindé, los más grandes y claves para interconectar vehicularmente a los demás, el próximo 6 y 15 de julio, en su orden, saldrán del rojo.

El primer paso que hizo ayer Esmeraldas fue suspender por una semana las transportación urbana para garantizar mayor confinamiento y reducir la curva ascendente de infectados en el cantón; Quinindé suspendió sus fiestas previstas para el 3 de julio que cumple 53 años de cantonización.

Hoteleros al borde de la quiebra

El cantón Atacames tiene la infraestructura hotelera más grande de Esmeraldas, entre habitaciones de hotel, hosterías y departamentos pueden albergar en simultáneo mAhoraura corporal,a temperatura corporra,ciar algunos letreros repetitivos como se vende o cerrado. ra ello, cada hotelero no deás de 25.000 personas. También están las casas de quienes llegan por temporada y no están catastrada.

Luego de tres meses sin clientes, al recorrer los malecones junto al mar de Súa, Tonsupa y de la ciudad de Atacames se evidencia algunos letreros repetitivos como “se vende” o “cerrado”. También están los que no dejan de darle mantenimiento a sus piscinas y habitaciones.

Capacitados en bioseguridad

Usando la tecnología, 50 representantes de establecimientos de alojamiento turístico, de alimentos y bebidas de Atacames, fueron capacitados virtualmente la semana anterior por el Ministerio de Turismo en cumplimiento de protocolos de bioseguridad.

La cartera de Estado har.ica, sin olvidarnos de la bioseguiridad»s, lo hacemos en pensando en la reactivaciativa al 171 del Ministerio de Salud P. no deá inspecciones que confirmen lo aprendido y lo dispuesto en el manual. Se le advirtió a los operadores turísticos que por la seguridad de todos, en caso de detectar sospechosos de Covid deben reportar al 171 del Ministerio de Salud Pública para la asistencia e implementación del cerco epidemiológico, tienen evitar el ingreso de enfermos, impulsar el lavado de manos, medir la temperatura a los clientes y trabajadores, usar mascarilla y conservar el distanciamiento social.

¿Qué pasará con masajitas, informales y carpas?

La dependencia turística no se centra en establecimientos de categoría 1, es decir, hoteles, cafeterías y restaurantes autorizados para recibir desde mañana, 1 de julio, a turistas. Junto al mar están vendedores informales, masajistas, trenceras y dueños de carpas, por esa razón Atacames tiene un 90% de dependencia turística.

Uno de los principales inconveniente con el grupo en época de pandemia, es que inciden en las aglomeraciones. El Municipio aprobó una Ordenanza que fortalece el uso de suelo en las playas. Uno de los más felices son los legalizados que han exigido que todo funcione amparado en la normativa que incluye pago de impuestos.

Como salida, el Cabildo limitará el número de carpas en las playas, las que se queden se ajustarán a las normas sanitarias. Las asociaciones deberán presentar protocolos de bioseguridad; la normativa también aplica para bares, plazoletas gastronómicas y artesanales, ya que en el Ministerio de Turismo no los categoriza.

«Algunas actividades tienen que desaparecer de las playas. Atacames cuenta con más del 40% de informalidad, según los estudios realizados”, lo advirtió en su momento la jefa de Turismo municipal, Nanci Bazurto Roldán. Que todo se cumpla dependerá en parte de la vigilancia de la Comisaría.

Abrimos nuevamente las puertas al turistas pensando en la reactivación económica del atacameño, sin olvidarnos de la bioseguridad”.

Freddy Saldarriaga, alcalde de Atacames.