Violación-aborto: ¿va legal?

LUIS COELLO KUON-YENG

En nuestro país la Asamblea está tratando de modificar el Código Orgánico de Salud en su parte relacionada al aborto. Básicamente ya se aprobó la despenalización y no inculpabilidad a los médicos que atiendan a mujeres embarazadas con un aborto en curso, independiente de la etapa del embarazo e independiente de que causa (voluntaria o involuntaria) provocó ese aborto. Lo que está aún represado y es medida de debate es lo concerniente al aborto en mujeres que se embarazaron producto de una violación.

En 1837 se promulgó el Código Penal ecuatoriano, en su artículo 456 condenaba a quienes provocaran abortos sin el consentimiento de la mujer 2 a 6 años de cárcel y con el consentimiento 1 a 4 años de prisión. Nuestro actual Código Penal reformado hacia el 2011 permite el aborto bajo tan solo 2 circunstancias muy puntuales; la primera llamada «aborto terapéutico», reza el artículo 447 lo siguiente: se hace para evitar Un peligro para la vida o salud de la madre, y si este peligro no puede ser evitado por otros medios. Y la segunda llamada «aborto eugenésico» si el embarazo proviene de una violación o estupro cometido en una mujer idiota o demente.

En este caso, para el aborto se requerirá el consentimiento del representante legal de la mujer. En un artículo (El aborto en el Ecuador) publicado en la página www.researchgate.net.se rechaza la despenalización del aborto por violación, tildando a esta iniciativa como inconstitucional, ya que esto nos llevaría a que en un determinado momento se permita el aborto en forma libre. ¿Qué de la mujer que embaraza al ser violada? En el mismo artículo se narra que el embarazo no provoca problemas psicológicos a la mujer, pero esto no es tan cierto como se escribe.

Que puede dar en adopción al bebé una vez nazca, sí es la opción más lógica y sensata, pero ¿debe la mujer violada soportar los 9 meses del embarazo con sus consabidos inconvenientes? La violación provoca consecuencias catastróficas y psicológicas enormes en la mujer, y un embarazo no deseado podría empeorarlas. Una cosa más, consideremos las enfermedades venéreas que pueden llegar incluso al bebé; VIR, sífilis, hepatitis B y C. Las mujeres violadas y embarazadas deben recibir apoyo y ayuda permanente. El tema es muy preocupante, el debate interminable pero la posibilidad de que se decida abortar por violación debe quedar en cada mujer, su familia como soporte y jamás someterla al escarnio ni a la desaprobación.

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