Depresión y alcoholismo afectan a esmeraldeños

AFECTACIÓN. En la ciudad de Esmeraldas se observa a diario a jóvenes y adultos deambulando por las calles, alguno de ellos bajo los efectos de las drogas o el alcohol.
AFECTACIÓN. En la ciudad de Esmeraldas se observa a diario a jóvenes y adultos deambulando por las calles, alguno de ellos bajo los efectos de las drogas o el alcohol.

La mirada de algunos pacientes de la psiquiatra, Teresa Cañarte, que esperan en su consultorio del hospital público ‘Delfina Torres’, luce ajena a la realidad que los rodean. La profesional trata entre 10 y 15 cada día, pero no todos están ‘locos’.

La profesional precisa que decirles locos no está bien, que lo correcto es definir qué tipo de caso representa cada paciente y sobre esa base darle la definición. La aclaración no solo la realiza por el calificativo, sino porque la ciudadanía asocia -erróneamente- que todos los que deambulan por las calles con problemas de conducta, con el dorso desnudo o de forma agresiva, son dementes.

Llegar a ese extremo los ubica como psicóticos agudos que se descompensaron en sus pensamientos y comportamientos, los que con acompañamiento psiquiátrico, medicamentos y apoyo familiar pueden recobrar su cordura.

La crisis afecta

Para atender a los pacientes críticos, el hospital cuenta con dos psiquiatras, igual número de psicólogos y 10 camas exclusivas para ese tipo de casos; además, se suman las unidades de intervención en crisis: terapia intensiva, emergencias, neonatos y quirófanos, donde se da apoyo emocional al interno y familiar de ser el caso.

Una de las funciones de los psicólogos o psiquiatras en las áreas de crisis, es buscar la forma correcta de darle al familiar del paciente la información médica, de tal manera que no le genere un alto impacto emocional.

En el caso de los pacientes ambulatorios que atiende la Psiquiatra, la mayoría son mujeres con cuadros depresivos generados por problemas sentimentales, laborales o económicos, los que al no tener la ayuda médica podrían ir hasta lo psicótico

Mientras que los hombres, que llegan en menor número en busca de ayuda emocional, van con trastornos del comportamiento por consumo de alcohol o drogas.

Ayuda interdisciplinaria

“Con la historia clínica determinamos el diagnóstico diferencial, si es depresivo o un psicótico con cuadro esquizofrénico”, detalla Teresa Cañarte, quien resalta que lo bueno de la Unidad de Salud Mental del Hospital es la ayuda interdisciplinaria que tiene a su disposición el paciente, ya que se tiene acceso a medicina crítica, al endocrinólogo u otro especialista que se requiera.

En el caso de las personas que deambulan en las calles y son llevados por voluntarios hasta el hospital público ‘Delfina Torres’, se les da la atención para estabilizarlos emocionalmente, luego se busca a familiares para que sean adherentes al tratamiento, ya que la clave está en el acompañamiento y suministro de medicamentos.

MI OPINIÓN

‘Falta un centro

de especialidades’

Algunos jóvenes afros necesitan psiquiatría para combatir la anti-salud mental que les afectan. Suelen andar semidesnudos por doquier como actores teatrales callejeros, solo faltan aplausos del público para que la obra teatral culmine.

Mientras tanto, el pueblo solo contempla. Para unos es burla y goce, para a otros es sinónimo de asco y miedo. Algunos de los que andan en las calles están con problemas de esquizofrenia o de depresión, que los puede llevar a intentos de suicidios.

Sería bueno que las autoridades coordinen un gran centro especializado de salud mental, para que con una atención integral convertirlos profesionales de la Patria.

Patricio Guayasamín,

Periodista y docente.