Riqueza nacional

Franklin Barriga López

Un funcionario gubernamental ha hecho declaraciones en el sentido de que nuestro país presenta en su territorio reservas de oro, plata y cobre que podrían calificarse entre las primeras del mundo. Se ha manifestado, además, que la aspiración de Ecuador es entrar, a fines del 2019, en la minería a gran escala, con lo cual esos millones de toneladas en metal que se encuentran sin explotar serían fuente de ingentes cantidades de dinero.

Los recursos naturales que caracterizan a nuestra Patria son de privilegio en los diversos órdenes, no solo en el área turística; garantizan óptimos días para el presente y el futuro, si se los sabe utilizar con capacidad y honorabilidad.

A comienzos del siglo XIX estuvo por estas latitudes Alexander von Humboldt, sabio alemán que dejó narraciones de interés sobre todo para la ciencia. Son conocidas las aseveraciones que se le atribuyen, luego de visitar estas latitudes: “Mendigo (el país) sentado en un banco de oro”. Otros afirman que tal dicho corresponde al italiano Antonio Raimondi, después de visitar el Perú. No falta quienes sostienen que la manida frase no es de ninguno de los dos.

Esta expresión, descartando por principio aquello de mendigo, retrata a una persona pobre muy tranquila sobre caudales que tanto necesita, lo cual sería inaceptable. En todo caso, si se pretende hacer una analogía en la mejor de las interpretaciones, se tendría que convenir en que nuestro país posee grandes riquezas no trabajadas, lo que ciertamente está fuera de duda.

Corresponde, por tanto, a quienes tienen en sus manos el asunto, laborar con inteligencia, diligencia y patriotismo en bien del progreso. Se trata de un tema sustancial que no puede estar a expensas de grupos de presión o intereses inconfesables.

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