Feria del libro

PRESLEY GRUEZO ARROYO


Si hay algo que produzca un gran placer, es la lectura de un libro, se los aseguro. En realidad es una parte de los beneficios de la lectura, porque también ayuda a aumentar el vocabulario, incrementa la creatividad, permite estar informado, etc.


Acudir a un día de feria de libros, permite la posibilidad de encontrar en un solo lugar muchas editoriales, consecuentemente una inmensa variedad de libros de las diversas temáticas.


Adicionalmente no solo es la venta de libros, también se realizan conversatorios con escritores, actividades lúdicas para niños, una genial idea como la de escuchar la lectura de la magistral obra de Miguel de Cervantes, ‘El Quijote de la Mancha’, en las voces de ocho personajes que se dedican al teatro. Esto sucedió en la ciudad de Guayaquil del 7 al 11 de septiembre de 2016.


Hago referencia a esta feria, por eso es necesario que en la dimensión poblacional nuestra y en el nivel de lectura -que es poco a nivel del país, se lee medio libro al año, según encuestas- se organice una feria de manera permanente. Debe ser en Esmeraldas y replicada en todos los cantones.


Me llamó la atención que el stand del Gobierno Municipal de la referida ciudad, tenga una abundante producción libresca y de folletos, que casi siempre están resaltando sus valores.


Cuando tengamos una sobresaliente obra física, acompañada de producción de libros, diremos “hemos ingresado con paso firme al desarrollo”, mientras tanto, empiecen por favor.


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