Familiares de pescador fallecido en Estados Unidos esperan cadáver

DOLIENTES. Los familiares del pescador César Geovanny González España, quien murió en una cárcel de Estados Unidos, esperan la repatriación del cadáver para sepultarlo en Esmeraldas.
DOLIENTES. Los familiares del pescador César Geovanny González España, quien murió en una cárcel de Estados Unidos, esperan la repatriación del cadáver para sepultarlo en Esmeraldas.

“Desde que conocí de la muerte de mi hijo en una cárcel de Estados Unidos, no puedo comer, en las noches pienso en mi hijo que murió lejos de nosotros. Pido a la autoridades de Ecuador que nos ayuden para la repatriación del cadáver”, dijo al mediodía de ayer, Walter González, padre del pescador César Geovanny González España, quien el 13 de agosto de este año murió en una cárcel de los Estados Unidos, donde estaba preso desde diciembre del año pasado.

Al dolor de perder a su hijo se suma Doris España, también su hermana Inés. Ellos esperan con ansias esa llamada a través de la cual les dirán que el cuerpo sin vida ya fue enviado de Estados Unidos a Ecuador, pues, cuando murió el pescador, esa fue la promesa de la persona que llamó desde la cárcel de Citroen, para comunicarles la infausta noticia.

Inés, hermana de César, afirma que en la oficina del Ministerio de Relaciones Exteriores en Esmeraldas, como dolientes ya realizaron la documentación correspondiente para la repatriación del cadáver incluso se tiene la funeraria contratada para retirar el cuerpo sin vida el día que llegue al aeropuerto coronel Carlos Concha Torres, en la parroquia Tachina.

Quieren sepultarlo

“No nos queda otra opción que esperar, hasta que nos llamen de Estados Unidos para informarnos que el cuerpo de mi hermano ha sido enviado a Ecuador. Pero nos causa sorpresa que la semana pasada llamamos al abogado que estaba a cargo de los trámites allá, y no dijo que él pensaba que ya nos habían enviando el cadáver”, dijo la hermana del pescador fallecido.

Doña Doris España, también está triste por la muerte de su hijo, quien salió de su casa en el valle San Rafael, el 4 de diciembre de 2017, a pescar, pero fue detenido en aguas internacionales el 7 de ese mes y año.

Los dolientes, luego de la muerte del obrero del mar, ahora solo esperan les devuelvan el cadáver para sepultarlo en Esmeraldas, y saber que en una tumba del cementerio general de la ciudad descansa, y poder visitarlo cuando quieran y llevarle flores.