Tragedias de pescadores en altamar

PESCADOR. Yilson Palma Ardila, junto a dos compañeros salieron a sus jornadas de pesca, pero no han retornado a sus hogares; su esposa Celeste Obando y familiares lo esperan.
PESCADOR. Yilson Palma Ardila, junto a dos compañeros salieron a sus jornadas de pesca, pero no han retornado a sus hogares; su esposa Celeste Obando y familiares lo esperan.

El martes 21 de noviembre y miércoles 11 de octubre de este año, son dos fechas que seis familias esmeraldeñas no olvidarán con facilidad, en esos días sus familiares zarparon a pescar, y desde allí, cinco de ellos no regresan a casa.

Celeste Obando es una de las personas que se aferra a la esperanza de volver a ver a su esposo Yilson Palma Ardila, quien junto a Sixto Alarcón Guerrero y José Obando Montaño, siguen reportados como desaparecidos, desde hace 22 días.

Dieciocho días después de salir de casa, la lancha en la que se movilizaban fue encontrada hundida, con sus dos motores a seis millas de las costas esmeraldeñas; el hallazgo no merma la esperanza de la mujer y madre de familia del pescador.

DESAPARECIDO. Javier Prado Sánchez, desde el 11 de octubre que salió de casa a pescar, no ha regresado.
DESAPARECIDO. Javier Prado Sánchez, desde el 11 de octubre que salió de casa a pescar, no ha regresado.

Resignación

“Tengo fe que pronto mi esposo aparecerá con vida”, lo dijo con firmeza la mujer, quien vive el callejón segundo del barrio ‘5 de Junio’, ribera del Esmeraldas, donde además se residen sus vecinos que tampoco regresan al hogar.

En cambio, en casa de Javier Prado Sánchez, quien se perdió en altamar junto a dos compañeros en octubre, la esperanza de encontrarlo con vida es casi nula. Su esposa Maritza Moyano, con problemas de movilidad, cree que su pareja posiblemente no regrese a más.

“Solo uno de los señores que iban con mi esposo se salvó, él dijo que un barco, en la madrugada mientras estaban pescando, los chocó y les destruyó la lancha”, relata la mujer, habitante del barrio 3 de Octubre, ubicado entre los sectores 26 de Junio y Nuevos Horizontes.

La tragedia ocurrió en Punta Gorda, parroquia Tonsupa, cantón Atacames. De acuerdo con versión del sobreviviente, Juan Vilela, sus dos compañeros de faena presuntamente se habrían ahogado luego del colapso, porque tenían puestos ponchos de agua y botas de caucho. (MGQ)