En la categoría 60 kilogramos el esmeraldeño Ismael Toala se consagró campeón mundial de kickboxing en Bolivia.
Edilayo Ismael Toala Olmedo, a sus 20 años logró conseguir el título mundial profesional de la KIC (Kickboxing Internacional Confederation) disputado en Cochabamba, ciudad del centro de Bolivia, el pasado sábado 13 de noviembre.
El luchador de raíces esmeraldeñas fue seleccionado a nivel país para representar al Ecuador, en un Grand Prix Súper 4, entre los mejores 60 kg de Uruguay, Argentina y Bolivia, logrando consagrarse campeón mundial de kickboxing, que a pesar de no contar con los recursos económicos ni apoyo de las autoridades locales triunfó en tierras lejanas.
Victoria
En la primera ronda, se enfrentó a Facundo Rodríguez, de Argentina, contra Diego Tellez, de Bolivia; seguido de Ismael Toala, de Ecuador, contra Nicolás Berruti, de Uruguay. Los ganadores de cada encuentro se disputarán la final, en la que Toala logró obtener su título.
Con esta victoria que se adjudica, Ismael Toala, gana un contrato para una pelea profesional en unas de las 5 ligas más importantes de Japón, que incluye hospedaje, alimentación y entrenamiento de 3 a 6 meses en la Academia Brasilian Thai, del país insular de Asia Oriental.
Fueron meses de entrenamientos de Ismael que sobrepasaban las 10 horas diarias, acompañada de una alimentación extremadamente adecuada. Desde su vivienda, en el barrio La Costeñita, entre Malecón y 10 de Agosto, centro de la ciudad de Esmeraldas, acudía hasta el segundo piso del estadio Folke Anderson, para entrenar.
Récords
Toala, acuña récords en sus combates, pero su paso por esta disciplina inició hace 5 años, inspirado por uno de sus hermanos y ahora su entrenador, Kevin Toala.
Después de entrenamientos intensos empezó adjudicándose segundos lugares en competencias dentro de Santo Domingo y fue siete meses después del terremoto de 2016, que obtuvo un primer lugar y su clasificación a los Juegos Bolivarianos.
Logró ser campeón Bolivariano en 2017, vicecampeón semiprofesional en boxeo en 2019, y multicampeón Nacional de Kickboxing y K1 en 2020.
Todos estos récords, han hecho que sus padres, Pedro Toala y Jasmine Olmedo, sienten orgullo de su hijo, los mismos que lo inspiran a continuar en su preparación física y en su dieta.