El último crimen ocurrió anoche. Además, cámaras de vigilancia evidencian varios robos a mano armada.

Eran las 20:00 aproximadamente de ayer lunes 05 de julio, cuando dos sujetos llegaron en motocicleta y uno de ellos entró a la sala de un domicilio en las calles Calderón y Eloy Alfaro, centro de la ciudad, para asesinar con 10 tiros en diferentes partes del cuerpo a Randy Cabezas, de 36 años, un expolicía que fue dado de baja de la institución en meses anteriores.

Melisa Patiño Cabezas, esposa del fallecido, indicó que mientras se encontraban en la casa de su compadre Geovanny Bucheli, festejando un cumpleaños, llegó un tipo de tez negra, mismo que procedió a realizar varios disparos de arma de fuego en contra de su esposo.

Hasta el lugar llegó personal de Criminalística para hacer el levantamiento del cuerpo y fue llevado hasta el Centro Forense de la ciudad.

Desde la Policía Nacional, se confirmó que el fallecido era investigado por asuntos internos de la institución y se presume que fue amenazado días antes. Mientras se encontraba en servicio activo, era el encargado del «Rastrillo» lugar de  almacenamiento y distribución de armamento que utilizan los gendarmes a diario.

Cabezas, se convirtió en la octava muerte violenta registrada en menos de 15 días  en la provincia verde y ha puesto en alerta roja a todas las autoridades del orden así como a la población.

Otro asesinato fue el de dos jóvenes en el sector de Codesa, al sur de la ciudad, el pasado sábado 03 de julio a las 19:30. Los dos hermanos asesinados Manuel y Geovanny Ordóñez de 25 y 26 años de edad, se encontraban en el exterior de su domicilio junto a su madre María Lucas, cuando fueron impactados con disparos desde un automóvil. Uno de ellos recibió seis impactos de bala, el otro, uno y la mujer quedó herida de gravedad.

Otro atentado de asesinato se registró ayer lunes 05 de julio en el barrio La Guacharaca, donde una menor resultó herida con un impacto de bala. Dos sujetos fueron los autores de una balacera en el sector.

Ante esta inseguridad, los esmeraldeños piden que se redoblen los controles policiales, que se mejore la iluminación de barrios conflictivos y que se aplique la ordenanza municipal que únicamente permite la movilización de una persona en motocicleta.

Erick Rivadeneira, jefe encargado del distrito Esmeraldas de la Policía Nacional, dijo que mantendrán la presencia policial donde hay mayor delincuencia criminal en barrios como la Guacharaca, 20 de Noviembre, Tripa de Pollo, las riberas, entre otros.

Asimismo, indicó que se  están realizando investigaciones y efectos vinculantes de culpabilidad en base a testigos y entrevistas para proceder con la captura de los actores intelectuales y materiales en el asesinato de los dos jóvenes.

Reducir la criminalidad

Para el nuevo Intendente de Policía de Esmeraldas, Rubén Ayoví, lo primero que se hará es disponer a todos los elementos policiales a patrullar las calles y colocarse en los lugares a donde los delincuentes se dan a la fuga  para la labor preventiva, asimismo convocó a las autoridades locales a articular acciones de seguridad para contrarrestar la delincuencia.

Robos a personas

El robo a personas se evidencia en cámaras de vigilancia en algunos sectores de la ciudad de Esmeraldas. Los robos de celulares, carteras, asalto en negocios y enfrentamientos entre presuntos miembros de organizaciones delictivas, triplican la inseguridad. El último fin de semana se registraron varios asaltos a mano armada, en barrio Chone, en el centro de la ciudad, en los barrios del sur de la ciudad y en el sector Las Palmas, los cuales quedaron grabados en las cámaras de vigilancia.

36 muertes violentas se han cometido en el cantón Esmeraldas y, las otras 23 en el resto de la provincia verde.