La vacunación ¿El éxito de un gobierno?

FABRICIO GUERRERO
FABRICIO GUERRERO

La escasez de vacunas, la falta de transparencia en el proceso o la mala distribución de estas sin duda han golpeado la imagen de algunos líderes latinoamericanos. En tiempos de pandemia se cree que el índice de vacunados determina si estamos (o no) frente a un caso de éxito en cuanto a la popularidad del gobierno y su gestión. Aun así ¿Qué tan cierta es esta premisa?

La verdad es que, aunque todo indicase que sí, los factores particulares de cada nación (especialmente en Latinoamérica) hacen que sea un complicado “si pero…no”. Por ejemplo, si miramos el caso colombiano o el ecuatoriano con Moreno podríamos decir que sí, pero si miramos hacia Chile veremos un índice de vacunación alto acompañado de un bajo respaldo popular. Al mismo tiempo, si giramos nuestra vista hacia países como México y Argentina, podremos apreciar una tasa de vacunación baja con niveles de aprobación superiores a la media.

La clave está en entender que las soluciones sanitarias no son la cura para problemas políticos. No podemos dar vuelta a la página tan fácilmente después de la pandemia a diferencia de otros Estados como Reino Unido o los Estados Unidos. Latinoamérica presenta problemas sociales que lleva arrastrando del pasado y que se han agravado por la pandemia, problemas como la falta de acceso a educación, internet o la brecha de género.

Aunque no exista una relación directa entre la tasa de vacunación y el índice de aprobación a un gobierno, es claro que ayuda acelerar la reactivación económica, factor necesario para poder pensar en dar vuelta a la página.