En Esmeraldas el 1,71 % de los niños, niñas y adolescentes entre 5 y 17 años trabajan y no estudian, según el INEC.
Desde el año 2002, todos los 12 de junio se conmemora el ‘Día Mundial de la Erradicación del Trabajo Infantil’, con el objetivo de visibilizar y redoblar esfuerzos para revertir la condición de los niños y niñas desde los 5 a 17 años que trabajan en cualquier actividad económica.
Y, aunque la mayoría de estas campañas de sensibilización, así como los proyectos en erradicación, tienen como objetivo disminuir y prevenir el trabajo infantil peligroso, a través de un conjunto articulado de políticas, programas y acciones, tendientes a enfrentar sus causas y efectos; esta problemática aún no ha sido erradicada siendo una realidad palpable, ya que según las cifras estudiadas en el último año, el trabajo infantil va en aumento en Esmeraldas.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), alertó que debido a la crisis causada por el coronavirus, era probable que las familias en situación de pobreza envíen a sus hijos e hijas al mercado laboral, lo que ha aumentado la tasas de trabajo infantil en la región.
Niños en las calles
En Esmeraldas la tasa de trabajo infantil estaba en 1.26% en el 2019 y, para el 2020 subió a 1.71%, según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC).
Roxana Quito, representante de la Junta Cantonal de Protección de Derechos en Esmeraldas, informó que la crisis económica ha sido uno de los factores por los cuales los niños salen a las calles a trabajar y, por ello se han creado proyectos que están en marcha para erradicar el trabajo infantil, “considero que hace falta un plan de acción por parte del Ejecutivo para salir de la problemática y, también la sociedad civil debe presentar propuestas”, señaló.
Además, indicó que en los estudios realizados se observó una nueva modalidad de trabajo infantil relacionada al acompañamiento o ayuda que los menores realizan cuando sus padres trabajan. “Con todos los emprendimientos que surgieron desesperadamente durante la pandemia, probablemente esta modalidad se incrementó”, sostuvo.
Mesas de trabajo
Por su parte, Álex Estupiñán, delegado de la Defensoría del Pueblo en Esmeraldas, propone que más allá de escuchar lo que está siendo el Gobierno ante esta situación, hay que formar mesas de trabajo donde tanto el gobierno nacional junto con los locales y la sociedad civil, trabajen en propuestas que permitan encontrar soluciones adecuadas. “Lo que hoy vemos es una invisibilización de los niños en este tiempo de pandemia», dijo.
Además, señaló que debe realizarse un proyecto de Erradicación de Trabajo Infantil, que busque disminuir las altas cifras y, fortalecer las estrategias para la reducción y prevención del trabajo infantil y trabajo forzoso, con charlas informativas y talleres de sensibilización dirigidos a personas de diferentes sectores sociales estratégicos.
No dar dinero
Algunas organizaciones e instituciones, recomiendan a no financiar el trabajo infantil entregando dinero en las calles a los niños, niñas y adolescentes.
Aldeas Infantiles SOS Ecuador, exhorta al Gobierno ecuatoriano a promover servicios integrales para las familias, a través de programas de emprendimientos productivos, capacitación, reconversión laboral y ofertas laborales que permitan superar los niveles de pobreza. (MFC)
Campaña de concienciación
El trabajo infantil representa una vulneración específica de los derechos de niñas, niños y adolescentes al mismo tiempo que compromete el cumplimiento de otro conjunto de derechos, manifestó Lucía Sosa, alcaldesa de Esmeraldas, quien estuvo en el lanzamiento de la jornada de sensibilización de la campaña de erradicación de la mendicidad y el trabajo infantil en varios puntos de la ciudad junto a la mesa cantonal de la niñez ayer viernes, 11 de junio.
Realidad de la niñez
*En Ecuador, el trabajo infantil se ubica en 8,3 %, según el INEC.
*El Gobierno Nacional en el Plan Nacional de Desarrollo tiene como meta erradicar el trabajo infantil de 5 a 14 años, reduciendo las cifras del 4,9% al 2,7% al 2021.
*En el mundo, 218 millones de niños de entre 5 y 17 años trabajan, 152 millones de ellos, son víctimas de trabajo infantil y casi la mitad, 73 millones realizan trabajos peligrosos, según la Organización Internacional del Trabajo.