Tábule, ubicado en la parroquia Tachina, al norte de Esmeraldas, es eminentemente agrícola y carece de algunas necesidades, la mayor parte de la población subsiste de lo que ellos cultivan, pero no tienen una vía con lastre sino con lodo, lo que les dificulta transportar sus productos.
Alrededor de 100 familias carecen de alcantarillado, también del suministro de agua potable debido a los constantes daños que sufre la bomba que extrae el líquido vital, otra necesidad de este poblado es la electricidad diaria, por ello los habitantes del recinto se ven obligados a pedir a las autoridades la intervención urgente frente a sus necesidades, ya que hay niños, personas con discapacidad y adultos mayores que requieren vivir dignamente.
Exigen atención
Danilo Angulo, morador del recinto, pide a las autoridades seccionales más atención con la finalidad de que las obras lleguen al poblado, según ellos, solo se hacen presentes en época de campañas electorales.
“Siempre hemos estado realizando las respectivas gestiones para que nuestra comunidad sea atendida como se lo merece, pero ninguna de las autoridades a las que le hemos pedido apoyo nos han ayudado”, dijo Angulo.
Los habitantes explicaron que sus necesidades tienen que ver con el mejoramiento de los caminos vecinales. “Necesitamos ayuda para nuestras carreteras, somos agricultores y necesitamos sacar nuestras cosechas, el lodo dificulta el paso en motocicleta, el cual es el medio de transporte más común de nuestra zona rural.”, indicó Yuli Estacio.
Matilde Quiñónez, moradora, expresó que, nunca ha podido ser testigo de una obra en beneficio de la comunidad. Ella piensa que las actuales autoridades deben tratar de arreglar este urgente problema que enfrentan.
Por ello, hacen un llamado a la Prefectura de Esmeraldas, quienes tienen la competencia para intervenir los caminos que conducen al recinto.
Asimismo, a CNEL EP para que la electrificación rural se maneje a través de proyectos y con ello se realice la inspección técnica para el servicio eléctrico. (MFC)
Alrededor de 100 familias del recinto Tábule no reciben obras, ni servicios básicos.