Los excesos de la libertad de expresión del portal La Posta contra el dirigente indígena Iza, son reprochables por donde se los mire. La despenalización de la calumnia e injuria, no los exime de ser castigados civilmente, pero tampoco debe considerarse una puerta abierta a lo que sucedió en TC.
No obstante, cuando en octubre de 2019 insultaron de mala manera al ex Mandatario, nadie dijo nada. ¿Nuestros indígenas son intocables? ¿No está la Conaie teniendo demasiada influencia en el devenir de la patria, cuando su población es apenas superior a la afro? Las ínfulas de Iza, cuya mentalidad de comunero en nada conviene al país, van a causar un retroceso de la influencia de su institución, en el quehacer político nacional.
La ley tiene que aplicarse igual para todos. Y la Fiscalía nos queda debiendo bastante. El caso del tráfico de medicamentos en plena pandemia por parte de los Bucaram, parece quedar en la impunidad. El manejo en el Min. de Salud ha venido siendo nido de ratas, más pestilente que el de las aduanas. En el caso Las Torres, en que el ex Contralor está embarrado hasta el cuello, ¿quedará impune sólo con su renuncia? La amenaza de la Ocles de «si caigo yo caemos todos», parece repetirse en el caso Celi. ¿Qué dice la Fiscalía y la CNJ al respecto? ¿Y la desfachatez de tener al Defensor del Pueblo despachando desde la cárcel? ¡Qué imagen la que proyectamos al mundo!
El país observa estupefacto las incongruencias y falencias de nuestra justicia, razón primera del porqué los inversionistas no llegan al país y no se genera empleo. Hasta se habla de traer asesoramiento israelí en la lucha contra el hampa, cuando esta se controla de raíz con más educación y empleo.
Es hora de que el gobierno de turno ponga las cosas en su sitio; lucha contra las mafias criollas; límites a los excesivos derechos adquiridos de los trabajadores y reformas laborales modernas que alejen la desconfianza en los empresarios; tasas de interés internacionales; e intolerancia a la enorme corrupción a todo nivel. Pero esta vez, que no sean meros slogans, el país así lo exige.
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