En el histórico barrio Las Peñas de Guayaquil, un enclave bohemio repleto de encanto y leyendas, se alza un inmueble patrimonial que se ha convertido en un verdadero bastión de la cultura local: la Casa Cino Fabiani. Esta antigua residencia, ubicada en la emblemática calle Numa Pompilio Llona, ha logrado trascender su función original para transformarse en un espacio alternativo dedicado a las artes, especialmente al teatro.
Sumergirse en la atmósfera cautivadora de la Casa Cino Fabiani es embarcarse en un viaje a través del tiempo, donde cada rincón rezuma historia y tradición.
Las paredes de este edificio colonial, construido al pie del imponente cerro Santa Ana, han sido testigos silenciosos de los pasos de generaciones de artistas, escritores y bohemios que han encontrado en este lugar un refugio para la expresión creativa.
Una historia enraizada en la tradición Italiana
La historia de la Casa Cino Fabiani se remonta a 1934, cuando Luigi Cino San Giovanni, un inmigrante italiano, adquirió la propiedad. Desde entonces, la residencia ha sido un legado familiar que ha pasado de generación en generación, convirtiéndose en un testimonio vivo de la influencia cultural italiana en Guayaquil. Arnaldo Gálvez, bisnieto de Luigi Cino San Giovanni y actual propietario de la casa, ha sido el guardián de este tesoro arquitectónico. Con una visión audaz y un profundo respeto por el patrimonio, Gálvez emprendió una meticulosa restauración del inmueble en el año 2007, dando inicio a una nueva era para la Casa Cino Fabiani.
Teatro Alternativo
La transformación de la Casa Cino Fabiani en un espacio dedicado al arte fue un proceso orgánico y apasionado. En 2009, Arnaldo Gálvez, junto con el actor Alejandro Fajardo y el director Jaime Tamariz, presentaron la obra “El Amante” de Harold Pinter, marcando el inicio de una nueva etapa para la casa como escenario teatral. Desde entonces, la Casa Cino Fabiani ha sido anfitriona de numerosas producciones teatrales de vanguardia, convirtiéndose en un refugio para las propuestas más audaces y arriesgadas del panorama artístico local. Sus espacios únicos, que incluyen un escenario principal al aire libre, salones íntimos y hasta un sótano lúgubre, brindan a los artistas una amplia gama de posibilidades para explorar nuevas formas de expresión.
Sumergirse en la atmósfera cautivadora de la Casa Cino Fabiani es embarcarse en un viaje a través del tiempo, donde cada rincón rezuma historia y tradición. Las paredes de este edificio colonial, construido al pie del imponente cerro Santa Ana, han sido testigos silenciosos de los pasos de generaciones de artistas, escritores y bohemios que han encontrado en este lugar un refugio para la expresión creativa.
Una historia enraizada en la tradición Italiana
La historia de la Casa Cino Fabiani se remonta a 1934, cuando Luigi Cino San Giovanni, un inmigrante italiano, adquirió la propiedad. Desde entonces, la residencia ha sido un legado familiar que ha pasado de generación en generación, convirtiéndose en un testimonio vivo de la influencia cultural italiana en Guayaquil. Arnaldo Gálvez, bisnieto de Luigi Cino San Giovanni y actual propietario de la casa, ha sido el guardián de este tesoro arquitectónico. Con una visión audaz y un profundo respeto por el patrimonio, Gálvez emprendió una meticulosa restauración del inmueble en el año 2007, dando inicio a una nueva era para la Casa Cino Fabiani.
Un escenario vibrante para el Teatro Alternativo
La transformación de la Casa Cino Fabiani en un espacio dedicado al arte fue un proceso orgánico y apasionado. En 2009, Arnaldo Gálvez, junto con el actor Alejandro Fajardo y el director Jaime Tamariz, presentaron la obra “El Amante” de Harold Pinter, marcando el inicio de una nueva etapa para la casa como escenario teatral.
Desde entonces, la Casa Cino Fabiani ha sido anfitriona de numerosas producciones teatrales de vanguardia, convirtiéndose en un refugio para las propuestas más audaces y arriesgadas del panorama artístico local. Sus espacios únicos, que incluyen un escenario principal al aire libre, salones íntimos y hasta un sótano lúgubre, brindan a los artistas una amplia gama de posibilidades para explorar nuevas formas de expresión.
Un espacio versátil para diversas expresiones artísticas
Además de su faceta como escenario teatral, la Casa Cino Fabiani ha sido el lienzo perfecto para otras manifestaciones artísticas. Sus paredes han albergado exposiciones de renombrados artistas locales e internacionales, como David Federico Palacios, Diana Gardenia, René Ponce y Leonardo Moyano, muchos de ellos graduados de la prestigiosa Universidad de las Artes. Asimismo, la casa ha sido el escenario de eventos privados, conciertos, sesiones fotográficas, comerciales y hasta rodajes de largometrajes. Su encanto único y su atmósfera cautivadora han cautivado a directores y productores de renombre, como Iván Mora Manzano, quien eligió la Casa Cino Fabiani como locación para su aclamada película “Sin otoño, sin primavera”.
Un refugio cultural en el corazón de Guayaquil
La Casa Cino Fabiani no solo es un espacio dedicado al arte, sino también un símbolo del espíritu bohemio y la riqueza cultural que impregna el barrio Las Peñas. Al recorrer la calle Numa Pompilio Llona, los visitantes se sumergen en un ambiente mágico, donde el tiempo parece detenerse para preservar la esencia colonial del puerto principal.
Entre las casas habitadas, bares, talleres de arte y tiendas de artesanías, la Casa Cino Fabiani se yergue como un faro cultural, ofreciendo una propuesta diferente y refrescante para los amantes de las artes. Su patio interior, bañado por la brisa del río Guayas y enmarcado por una porción del cerro Santa Ana, crea un escenario único e inolvidable.
A medida que los años transcurren, la Casa Cino Fabiani continúa evolucionando y adaptándose a las necesidades de la comunidad artística local. Desde su reapertura en 2014, Arnaldo Gálvez ha dedicado sus esfuerzos a mantener un programa cultural vibrante y diverso, acogiendo propuestas teatrales, exposiciones y eventos que desafían las convenciones y exploran nuevos territorios creativos. La casa se ha convertido en un punto de encuentro para artistas emergentes y consolidados, un espacio donde las ideas fluyen libremente y las fronteras entre disciplinas se desdibujan. Cada nueva producción, cada nueva exposición, es una oportunidad para celebrar la diversidad cultural de Guayaquil y fomentar el diálogo entre diferentes expresiones artísticas.
Un futuro prometedor para las artes en Guayaquil
A medida que la Casa Cino Fabiani sigue escribiendo su propia historia, su impacto en la escena cultural de Guayaquil se vuelve cada vez más significativo. Este espacio singular se ha convertido en un punto de referencia para los amantes de las artes, atrayendo a audiencias ávidas de experimentar propuestas frescas y desafiantes. Más allá de su función como escenario artístico, la Casa Cino Fabiani representa un legado vivo de la tradición italiana en Guayaquil, una conexión directa con las raíces culturales que han dado forma a la identidad de la ciudad. Su éxito es un testimonio del poder transformador del arte y de la importancia de preservar y celebrar el patrimonio cultural. En los años venideros, la Casa Cino Fabiani seguirá siendo un faro cultural en el corazón de Guayaquil, un lugar donde los sueños artísticos cobran vida y donde las fronteras entre disciplinas se desdibujan.
Josué Navarrete G.