Dragado en Puerto de Esmeraldas revela preocupante contaminación marina

Draga Tena enfrenta retos por contaminación en Puerto de Esmeraldas

El proceso de dragado en el Puerto Comercial de Esmeraldas está sacando a la luz una alarmante realidad sobre la contaminación de nuestros mares. 

Lo que inicialmente se planteó como una operación rutinaria para mejorar la profundidad de la dársena, se ha convertido en un desafío ambiental que requiere atención urgente.

Obstáculos inesperados en el lecho marino

La draga Tena, encargada de esta crucial tarea, se enfrenta diariamente a obstáculos que van más allá de los sedimentos y rocas esperados. Entre los materiales extraídos se encuentran desechos, basura, escombros y, sorprendentemente, materiales pesados de hierro y acero. Estos hallazgos no solo ralentizan significativamente el proceso de dragado, sino que también ponen de manifiesto la gravedad de la contaminación en nuestras aguas.

Impacto en la operación de dragado

La presencia de estos materiales ajenos al entorno marino está provocando interrupciones constantes en el trabajo de la draga. El cabezal cortador, una pieza fundamental del equipo, se ve frecuentemente obstruido por estos desechos, obligando a detener las operaciones para su limpieza y mantenimiento. Esta situación no solo aumenta los costos y tiempos del proyecto, sino que también revela la urgente necesidad de abordar la contaminación marina de manera más efectiva.

Llamado a la conciencia ambiental

Este descubrimiento subraya la importancia crítica de la concientización ambiental. Es imperativo que la población comprenda las graves repercusiones que tiene el arrojar desechos al mar. Estos materiales no solo afectan las operaciones portuarias, sino que también representan una seria amenaza para la flora y fauna marina de nuestros ecosistemas costeros ecuatorianos.

Las autoridades portuarias y ambientales hacen un llamado urgente a la comunidad para que se involucre activamente en la protección de nuestros mares. (DLH)