18 rostros de mujeres representan la lucha contra la violencia

muestra pictórica
OPERATIVO. A través de la operación policial ‘Fuego 36’ se decomisaron galones de combustible, motores robados y un arma de fuego en la Tola, parroquia del cantón Eloy Alfaro.

Una muestra pictórica se inauguró ayer en el auditorio de cristal de Flopec y estará abierta al público por un lapso de tres semanas.

Son 18 mujeres históricas, contemporáneas y anónimas entrelazadas por el vínculo de la violencia de género, varias de ellas lo vivieron, lo combatieron y son fiel representación de sus procesos en una muestra pictórica denominada, ‘Míralas, mírate, vidas en resistencia’, que se inauguró ayer en el auditorio de cristal de Flopec, en el balneario de Las Palmas.

Su presentación responde a la campaña ‘Mujeres sin violencia ¡Así gana Ecuador!’, cuyo objetivo es sensibilizar y generar conciencia en la sociedad ecuatoriana sobre la importancia de prevenir y combatir la violencia contra las mujeres, involucrando a instituciones del Estado, sector privado, medios de comunicación, academia, deporte y otros.

Rodolfo Quiñónez, de la Sociedad Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ) y del Programa de Frontera Norte, Desarrollo y Paz, explica que dentro de las pinturas las mujeres podrán sentirse identificadas con cada una de ellas, esperando visibilizar, tal vez, la violencia que sufren y que no deben callar más.

Historias

“A los 5 años, fue regalada como esclava a Manuela Sáenz. Cuenta la historia que fue amiga incondicional de ella y que ayudó en la independencia llevando y trayendo mensajes vestida de soldado”, refiere la historia de Jonatás, mujer esclava y luchadora, que forma parte de los murales.

A ella se le suma, Marcia Petita Quintero, quien sufrió una triple discriminación, por ser mujer, negra y pobre. Desde niña trabajó junto a su madre en ventas ambulantes, pero aún así terminó el bachillerato y siguió la universidad, siendo hoy una abogada reconocida por su trabajo en la defensa de los derechos de las mujeres.

También hay relatos más crónicos, que duelen al terminar de leerlos. De mujeres anónimas que no pudieron contar sus propias historias. “La chica era lesbiana, la llevaron a una clínica en Guayaquil para deshomosexualizarla. Le aplicaron la ‘violación correctiva’, la mantuvieron escondida, la obligaron a usar tacones y maquillaje. Ella no puede contarlo porque se suicidó, por eso lo cuento yo”, termina.

Proceso

La muestra estará por un periodo de tres semanas en Esmeraldas, luego en otras ciudades. En los cuadros a más de las fotos, existen lecturas de mujeres con sus luchas, precisó Quiñónez.

La campaña de Mujeres sin Violencia sostiene que, de acuerdo con estudios, invertir en prevención siempre será más beneficioso y eficiente que invertir en ayuda para mujeres que experimentan violencia, pues en muchos casos el daño a la mujer es muy profundo y costoso a todo nivel (psicológico, físico, económico). (JSG)

Siete de cada 10 mujeres ecuatorianas sufren algún tipo de violencia. Además de ser una violación de los derechos humanos, es un delito y un grave problema de salud pública.