Los giros del gobierno

Guillermo Lasso no es el primer presidente  —y seguramente no será el último— en descubrir que el plan de gobierno que había concebido antes de llegar al poder, cuando todavía ‘veía los toros desde la barrera’, resultó en gran parte inaplicable. El giro que se ha visto obligado a dar en relación a sus promesas de campañaen gasto público, en lo tributario y legislativo.— no constituye traición a sus electores ni falta de coraje, sino oportunas rectificaciones en base a los problemas profundos y reales que muestra la realidad.

Ningún Estado es una hoja en blanco; en el caso del ecuatoriano, existen compromisos, instituciones, tradiciones y hábitos, algunos de larga data, que un presidente debe saber honrar y gestionar. Entender la complejidad del Estado demanda tiempo, un equipo de confianza y capacidad de análisis; todo ello, además, en un contexto político, en el que la lealtad, la ética y la transparencia escasean.

Como si fuera poco, dos décadas de correísmo construyeron un Estado a la medida —muy difícil de pilotear por un ‘recién llegado’ — y lo atiborró de funcionarios y mandos medios alineados —ideal para entorpecer cualquier iniciativa ajena al libreto—. Incluso así, el presidente Lasso prefirió prescindir de la vasta experiencia socialcristiana en la navegación de los recodos del poder político.

Ahora, lo que más se requiere es transparencia. Los ajustes  solo contarán con apoyo si la ciudadanía entiende los motivos y reconoce sinceridad en ellos.

FRASES DEL DÍA

«Nunca le confío grandes asuntos a quien veo que no es capaz de hacerse cargo de los pequeños asuntos.”

Lawrence Bell (1894-1956), industrial norteamericano

 

«La intensidad de una pasión se mide por la soledad que la precede.”

Xavier Velasco (1964) , escritor mexicano