Estados Unidos, ¡presente!

Estados Unidos no es solo la mayor potencia mundial, sino también la más cercana a nosotros, tanto en sentido geográfico como económico y cultural. Pese a las transformaciones geopolíticas que el mundo vivió en los últimos años, sigue siendo nuestro mayor socio comercial, el principal destino de compatriotas que emigran en busca de mejores oportunidades, el referente educativo al que aspiran la mayoría de los más brillantes ecuatorianos y, sobre todo, el bastión del sistema político que, en materia de las libertades individuales y prosperidad, carece de un rival.

Hasta hace poco, la diplomacia ecuatoriana estuvo guiada por el ego del caudillo de turno y el apuro que viene de gobernar de forma desordenada. Eso hizo que, equivocadamente, se le diese muchas veces la espalda a los grandes intereses nacionales y a aliados históricos. En esa línea, la significativa visita del secretario de Estado Antony Blinken, máxima autoridad de la diplomacia estadounidense, constituye un alentador indicio de que la política exterior ecuatoriana puede volver al cauce que favorece a la amplia mayoría de compatriotas.

Frente a los grandes desafíos que enfrenta Ecuador en este momento —combate a la corrupción, defensa de la democracia, freno al narcotráfico, lucha contra la pobreza, atracción de inversión, mejora de la educación y de la salud pública— Estados Unidos puede ofrecer una ayuda invaluable. Es hora de dejar atrás complejos caducos que le causaron tanto daño al país y aprovechar los beneficios que aquella potencia ofrece para Ecuador.

FRASE DEL DÍA

«Los grandes líderes suelen ser grandes simplificadores que, por sobre la discusión, el debate y la duda, ofrecen soluciones que todo el mundo puede entender.”

Colin Powell (1937-2021), militar y político estadounidense