Desapariciones voluntarias

Con ese eufemismo se refiere la Policía Nacional al 95% de los menores de edad que diariamente desaparecen de sus hogares en territorio ecuatoriano. Si bien el 85% de todos los casos de menores perdidos se resuelven dentro de las primeras semanas, al menos 71 niños siguen desaparecidos desde inicios de 2021. 10% de las víctimas aparecen, pero sin vida.

Como disco rayado, la Policía repite las causales: “problemas sentimentales” o la inhabilidad de los jóvenes de sobrellevar la abstinencia de drogas y alcohol -causal muy citada durante los meses de encierro-, pero en muchos casos también por ser “víctimas de violencia intrafamiliar”.

Esto hace que “voluntariamente” los menores huyan de sus casas, según la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased).

El lenguaje que utilizan las autoridades no debe tomarse a la ligera. Cuando huyen de sus casas, miles de menores responden al llamado de redes de tráfico, prostitución infantil y otras estructuras de explotación.
Aunque no se trate de un secuestro o extorsión, llamar a estos hechos “voluntarios” es ignorar la negligencia ante el cuidado que ejercen no solo padres o guardianes, sino una estructura familiar viciada y violenta, un sistema educativo que en ciertas zonas brilla por su ausencia y la sociedad completa.

FRASES DEL DÍA

«El contrato moral es comprender que el mal de nuestra sociedad es la violencia.”

Elisa Carrió (1956- )
Política y abogada argentina.

«La política económica de ese gobierno castiga a millones de seres humanos con la miseria planificada”.

Rodolfo Walsh (1972-1977)
Periodista argentino.