El arte de escribir

Miguel Méndez Guerrero

Si, así de sencillo, el escribir también es un arte considerado como expresión literaria, en donde clasificamos temas, ordenamos ideas, escribimos conceptos u opiniones para trasmitir a los lectores.
En una página o carilla de trescientas palabras se pone a prueba el intelecto para resumir cientos de hojas, leerlo, releerlo, corregirlo y ponerlo a punto para que sea digerible o comprendido.

La investigación es arma letal para justificar cualquier mala interpretación y se remita a las pruebas que deben estar legalmente sustentadas en forma ética y moral, para su afirmación. Lo importante es gozar de credibilidad.

Los cinco sentidos se ponen a prueba así: El gusto para delinear bocetos; el oído para escucharnos y tratar de entender lo que escribimos; el tacto para con tino no herir susceptibilidades, sino más bien curar en sano los errores; la vista para dar color a nuestro interior por lo expresado en líneas y el olfato para percibir las sensaciones de los receptores.

También estamos expuestos a la crítica, pero en su mayoría constructiva, porque quienes tenemos ese don de escribir no somos tildados ni encuentran en nosotros el llamado “rabo de paja”, porque nuestras actuaciones siempre han sido apegadas a derecho; posiblemente cometimos o cometamos errores como humanos que somos, pero nunca de mala fe.

Sin temor a equivocarme practicamos valores de respeto, consideración, lealtad, solidaridad. Creo que con ello en mi caso estoy dando respuesta a mucha gente que siempre me han preguntado: ¿Por qué escribes? ¿Cuánto te pagan? ¿Qué sacas de provecho? Soy hombre libre y de buenas costumbres, soy feliz y estoy llegando al millón de amigos que me propuse algún día.

Los invito a formar parte de este grupo de ciudadanos y ciudadanas, que con nuestros artículos entregamos un aporte positivo al desarrollo de nuestra sociedad.

[email protected]