Necropolítica

Iván Paredes

Hemos llegado al punto máximo de la insensibilidad y egoísmo, donde el individualismo se ha reflejado en las esferas políticas y gubernamentales.

Para entender definamos el significado de esta palabra que nos causa incomprensión, confusión y hasta susto, más cuando, no se encuentra en el Diccionario de la Real Academia porque es de recién aparición en aquellos debates políticos donde hablan mucho, pero dicen poco; es decir, la Necropolítica es “el uso del poder social y político para decidir cómo determinadas personas pueden vivir y como deben morir, incluida la Naturaleza, reemplazando así la justicia social por la caridad y clemencia”.

Este hecho que ha sido utilizado por los Estado – Nación quedo reflejado con la pandemia al no existir políticas de estado que aseguren y garanticen la vida del ser humano diferenciando entre los rescatables y los desechables.

Prueba de ello, es lo sucedido meses atrás en nuestro país con un Ministro de Salud que abuso de su poder gubernativo para apropiarse de las vacunas contra el Covid-19 adquiridas por el Ecuador para favorecer a toda su familia y, el gobierno y la justicia ciega como sucede en estos casos.

En Japón, dieron de alta a cerca de setenta mil personas con problemas psiquiátricos, aduciendo que el presupuesto no alcanza para cubrir sus gastos y que dichas personas no constituyen un aporte para el país; en Brasil, el presidente Bolsonaro adujo que se trata de una simple gripe y aprobó el uso de armas, siendo los desfavorecidos mendigos y pobres. Y, qué decir de los impactos ambientales a nivel mundial.

La desigualdad e injusticia social enseña su rostro, se protege con trabajo y sueldo a determinadas personas y se confina al ciudadano común limitándole a laborar y obtener ingresos para su subsistencia, aduciendo que “si te mueres es tu culpa, no la mía”.