Cuando el cine desnuda la realidad

Positividad tóxica
Personaje lojano

Álvaro Peña Flores

El cine, al menos el buen cine, intenta vincularnos con el mundo real, desde sus orígenes ha captado momentos de la historia que se han quedado grabados en la memoria colectiva. El extenso listado de géneros que hoy en día existen nos muestra la realidad del mundo, quizá sea un llamado a ser o no ser, a actuar o a quedarnos impávidos, a reír o a llorar, a vivir o a matar; pero siempre evoca una emoción y nos impulsa a soñar y a actuar. Hay un clásico buenísimo llamado “12 Angry Men”, (12 Hombres en Pugna en español), cuyo tema central gira en torno a la decisión que 12 jueces, escogidos de entre los comunes mortales, tienen que tomar para condenar o absolver a un chico acusado de asesinato.
El ser humano siempre está en el centro de todo, y esta vez no es la excepción. Impartir justicia siempre ha sido una tarea difícil, no solo para los jueces, sino para todos quienes formamos parte de la polis. La decisión debía ser unánime: 12 a 0, para condenar o absolver. En la primera votación ocurre lo interesante en torno a lo cual girará la historia; hay uno que cree en la inocencia del acusado y con un gran signo de empatía y amor al prójimo – porque se trataba de vida o muerte -, decide sembrar en el resto, la duda; e invita a analizar con justa razón su decisión.
¿Por qué condenar? Dejarse llevar por las apariencias y los prejuicios de la sociedad que dice que la maldad o bondad del hombre están demarcadas por la clase social a la que pertenecemos; o que la miserable vida que a muchos les ha tocado vivir, es causal para matar. No, todo esto son prejuicios que acompañan al hombre en toda su historia y que a la mínima oportunidad los empleamos para hacer el mal. Por desgracia los sistemas de justicia están plagados de este tipo de personas y de pensamientos que coartan la libertad y su forma de actuar de forma imparcial y justa. Hay mucho que analizar de este peliculón, se lo hará en las próximas ediciones.

@alvariñopeña