Lenin Moreno: Un cuento con moraleja

FABRICIO GUERRERO
FABRICIO GUERRERO

Moreno se ha despedido oficialmente del cargo de presidente, felicitan la “maravillosa” gestión de sus ministros, siendo aplaudido (únicamente por ellos) mientras se retiraba la banda presidencial. Con la posesión de Guillermo Lasso y asegurando haber “cambiado la historia” Lenin Moreno se despide dejando su legado en el Ecuador, pero… ¿Cuál es exactamente su legado?

El gobierno de Moreno sin duda se caracterizó por reajustar sus propuestas de campaña una vez llegado al poder ¿Cómo? En su campaña prometió un millón de empleo junto a 325.000 viviendas con el plan “Casa para Todos”. Ambas metas fueron reajustadas no una, ni dos veces pues el número de empleos se redujo a 500.000 y las viviendas en 1420.000, es decir, más de la mitad de la meta inicial.

Cabe recalcar que ni con las reducciones el gobierno pudo cumplir con lo prometido en vista que solo se generaron 123.000 empleos y la tasa de desempleo creció un punto en comparación del 2017. No obstante, el presidente no se va sin su pensión pues asegura que “El mejor premio a los corruptos es quitarles la pensión porque no la necesitan. Quienes no hemos sido corrompidos sí la necesitamos”.

Moreno puede adjudicarse el decrecimiento del PIB más profundo en el último siglo o el haber generado una deuda casi al nivel de Mahuad, sin embargo, NO se le debe adjudicar el “descorreizar” el Ecuador. En primer lugar, el correísmo sigue vivo, sigue presente en la Asamblea, aun mantiene un poder influyente en la política siendo la principal oposición del gobierno actual. El glorificar a Moreno por una “hazaña” que ni si quiera es real solo es distraer la mirada de los errores en su gestión.

El simple hecho que admitiera que no existía un plan específico de vacunación si no uno “general para conseguir los recursos para acceder a las vacunas” denota la calidad de su trabajo como presidente. Si es necesario recordar su gestión será para analizar las consecuencias de un voto sentimentalista y los efectos del periodo de mayor inestabilidad política en el Ecuador con cuatro vicepresidentes, siete ministros de ambiente, siete secretarios de comunicación, seis ministros de salud, cinco ministros de vivienda, cinco ministros de gobierno y cinco ministros de transporte.