Después de hoy…

Andrés Pachano Arias

Ha concluido una campaña electoral vacua y humillante, plagada de falsedades y escarnios, de arbitrariedades legales e insultante para la inteligencia de los ecuatorianos por su carencia de ideas y su ausencia de profundidad; sin debate y solo con denuestos; en ese marco y con ese antecedente, los ciudadanos de la patria se pronunciaron en las urnas y elegir nuevo Presidente de la República para un próximo cuatrienio que se iniciará el 24 de mayo próximo.

Cuando estas letras se publiquen, quizá se tendrán ya las cifras exactas alcanzadas y la diferencia que separe a los dos finalistas de esta densa, por abusiva e insultante -de parte y parte- campaña electoral. Habrá que esperar los resultados definitivos que los emita el Consejo Nacional Electoral pero, creo, con riesgo a equivocarme que comparando las históricas definiciones presidenciales en segunda vuelta en el país desde el retorno a la democracia  (¿se puede llamar?) en 1979, la definición de este 13 de abril de 2025 presentará una de las mayores diferencias porcentuales entre los dos finalistas.

Sorpresivo, muy sorpresivo el resultado, se esperaba una definición, para cualquiera de los finalistas, muy estrecha, con un margen de votos muy pequeño; en la realidad, la diferencia, para nada despreciable, parece superar el millón de votos. Siendo así, aquel pronunciamiento de desconocer los resultados electorales, no tiene mayor asidero que no sea si no un postrer y lacrimoso lamento, triste bálsamo para  expiar amarguras y conformar ánimos alicaídos.

Pero más allá de los resultados de una contienda electoral entre dos candidatos de dos movimientos similares entre si, cuya voluntad gira solo en torno a un líder, en rededor a su identidad y no de las ideas; cuando ya no está vigente lo colectivo -principio fundamental de la democracia- sino el afán de la semejanza; cuando los personalismos se han superpuesto y lo social es un pretexto en los dos movimientos finalistas, la inquietud es: ¿Qué esperamos para los mañanas de la patria?

Después de hoy… ¿qué?

Ambato, 13 de abril de 2025